La gran novedad de Skoda en el próximo Salón de París -aunque parece que como concept- va a ser la nueva generación del Rapid Spaceback, que la marca checa ha mostrado en algún boceto y al que ha bautizado como Vision RS. De él hemos podido ver también un boceto del interior en el que se muestra un aire más deportivo que el ofrecido en el actual Spaceback.
Porque la marca checa quiere subir un escalón en este disputadísimo segmento para poder competir con los rivales más clásicos del mercado europeo: Volkswagen Golf, Ford Focus, Renault Mégane, Opel Astra, Peugeot 308 o Seat León… Y también con modelos de marcas asiáticas que también han conquistado un buen número de clientes en los últimos años: Hyundai i30, Kia Ceed o Mazda3.
Nueva plataforma
Para ello, la marca del Grupo Volkswagen va a utilizar todo el arsenal tecnológico disponible. Empezando por la plataforma, que podría ser la MQB -como la utilizada por Seat León o Volkswagen Golf– o la MQB A0 -utilizada por Seat Ibiza, Volkswagen Polo o Audi A1-. En ambos casos cualquiera de las dos plataformas son mucho más avanzadas que la del actual Rapid, que es la que utilizaba el Seat León de la anterior generación.
Y el uso de cualquiera de estas dos plataformas permitirá que la gama de motores del futuro modelo compacto cuente con alternativas movidas por motores de gasolina, diésel y también sistemas Mild Hybrid, de hibridación ligera, con los que podrá contar con la etiqueta ECO como modelo poco contaminante.
Aunque lo veremos como concept en el Salón de París, posiblemente la versión definitiva no vea la luz hasta el próximo Salón de Ginebra, en 2019. Para entonces veremos si mantiene el nombre de Rapid u opta por una nueva denominación. Y también si se ofrece alguna otra carrocería -recordemos que el actual Rapid dispone de un sedán además del cinco puertas-.
Lo que está claro es que, más que nunca, este será el Golf de Skoda.