Cada año mueren más de un centenar de personas en las carreteras… por atropello. Sí, hay muchas formas de morir en contextos así y esta no es una novedad. De hecho, en 2019 fueron 115, según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT). Son muchos los conductores que se quedan tirados por una avería o tienen un accidente y, tras parar, transitan por la calzada indebidamente, algo que no se debe hacer.
Por ello, si te surge un imprevisto en la carretera y te ves obligado a parar, inmoviliza el vehículo en un sitio seguro, señalízalo y protege a los pasajeros. Estas son las indicaciones principales, pero además evita cualquier riesgo en estas situaciones porque siempre va a ser responsabilidad del conductor.
La letalidad es mayor al parar y reparar tu vehículo
Vemos habitualmente vídeos de atropellos porque el conductor, de forma imprudente, intenta arreglar rápidamente su coche. En caso de avería o pinchazo, no te juegues el físico para reparar tu vehículo y mejor llama a tu servicio de asistencia en carretera. Y es que el mayor índice de letalidad en un atropello se produce precisamente cuando la víctima está reparando su vehículo.
Ojo. Si vas acompañado por otras personas, evita que estas invadan la calzada. Piensa también que no siempre es aconsejable mantenerlos dentro del vehículo: si te has quedado inmovilizado dentro de la calzada, los ocupantes tienen que salir y situarse, a salvo, fuera de la vía.
