Llevar los cristales del coche limpios es francamente complicado en cualquier época del año, pero especialmente en verano por culpa del polvo en suspensión. Dejarlos relucientes también es una tarea complicada. Te contamos cuál es truco para dejarlos impecables de forma rápida y barata.
Mantener limpios los cristales del coche es fundamental para conducir de forma segura. A través de ellos vemos absolutamente todo lo que nos rodea al circular, por lo que llevarlos en buen estado es crucial para garantizar la visibilidad. La luna delantera es especialmente importante, pero también lo son todos los demás.
El truco infalible para limpiar los cristales de tu coche
Cuando el cristal está frío y evitando que le dé el sol (el calor seca el producto rápidamente y lo convierte en suciedad), hay que rociarlo con limpiacristales. Se deja actuar unos segundos y se limpia con un trozo de papel limpio. Para conseguir un resultado óptimo, con otro trozo de papel limpio se da otra pasada, a modo de repaso, para secar cualquier resto de producto y dejarlo impecable.
El mismo truco se puede aplicar para limpiar los cristales de tu coche por dentro. Con el tiempo, también acumulan suciedad y limitan la visibilidad. Utilizar papel y limpiacristales funciona mejor que una bayeta o un trapo. Estos últimos dejan rastro casi siempre, pero todavía más cuando no están limpios.
