La bola del remolque es tan amada como odiada. Muchos conductores encuentran este accesorio muy útil cuando necesitan más espacio, ya sea enganchando un pequeño remolque, o incluso para llevar una caravana. Pero no es tan aplaudida a la hora de aparcar, pues chocar contra una bola de remolque provocará que tu parachoques no salga muy bien parado.
Por eso los vehículos con bola enganchada generan ciertos recelos y dudas. Hay mucho desconocimiento respecto a este sistema y puede generar más de una multa a sus usuarios. Para que eso no te ocurra te explicamos todo lo que debes saber respecto a la bola del remolque.
Para poder llevar en el coche una bola de remolque has tenido que homologarla
Desde hace unos años la instalación de una bola de remolque, sea del tipo que sea, se considera una reforma de importancia en el vehículo y tiene que pasar por los trámites que se exigen cuando hay una alteración de esta magnitud en el vehículo.
Para empezar la bola debe contar con el certificado del taller instalador, también tiene que tener la homologación del propio producto y un informe de conformidad. Además tendrás que pasar otra vez por la ITV para que te den el visto bueno y lo incluyan en la tarjeta de Inspección Técnica del Vehículo.
