A simple vista puede parecer un innovador garaje en el que los coches se aparcan en pisos de forma automática. Pero en realidad, es una enorme máquina expendedora de automóviles. La ha instalado el gigante del comercio electrónico Alibaba en la localidad china de Guangzhou y, por el momento, solo contiene coches de la marca Ford, incluidos modelos como el Mustang, el Explorer o el Kuga.
Alibaba, que ya dispone de estas máquinas expendedoras gigantes en Shangai o Singapur, permite a los usuarios solicitar el coche elegido a través de una app en el móvil. A la hora de recogerlo, el sistema realiza un reconocimiento facial del cliente y después el automóvil se deposita de forma automática a la puerta de este singular concesionario.
Esta máquina instalada en Guangzhou, que tiene capacidad para 42 vehículos, permite realizar una prueba de tres días con el coche realizando un pago de reserva. La denominan 'Supercentro de pruebas de conducción', aunque, en caso de que el usuario quiera quedarse con el vehículo, se le devolverá la fianza depositada y tendrá que contactar con un concesionario.
