Parece que el otoño esta haciendo acto de presencia. Los dias duran menos, las lluvias, no mucho, pero quieren regresar y se presume así que el clima, y las condiciones para conducir van a cambiar. Tu coche que ha funcionado de maravilla este verano, parece estar en condiciones de afrontar esta nueva etapa del año. No obstante para no pasar por alto detalles, que con la relajación de las vacaciones se olvidan, siempre es conveniente revisarlo todo para afrontar la época de lluvias, frio y poca luminosidad. No olvides que no dejas de trabajar y moverte en coche, por qué vaya a venir el otoño, mas bien al contrario.
Preparar tu coche para el agua de otoño
La lluvia, la niebla y el hielo afectaran a tus cristales de manera que reducirán la visibilidad. Gafas limpias, vista limpia. Hay dos elementos en el coche que garantizan esto.
Los limpiaparabrisas, tanto delantero como trasero, hazlos funcionar en todas las velocidades que te preste el selector y revisa a conciencia las escobillas. No lo hagas con los cristales en seco, puedes apoyarte en tus niños mientras se lava el coche en el jardín de casa. Y la inestimable luna termica. Esa luna trasera totalmente inundada de rayas negras que por arte magia deshielan el cristal y así puedes ver por el retrovisor. Comprueba que el testigo del cuadro indica su buen funcionamiento. Dejala un rato en marcha y luego posa la mano en el cristal notaras que esta mas caliente. Siempre han sido muy leales.
