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Skoda Fabia Combi. Al fondo hay sitio

Quizás sea un segmento que pasa muy de puntillas en España, pero lo cierto es que se trata de vehículos sumamente atractivos, ya que en un tamaño compacto son capaces de ofrecer un volumen en el maletero que impresiona. Y en este sentido habrá que preguntar a Skoda cuál es su secreto para poner en juego unos compartimentos de carga superiores a los del resto de sus rivales… y en todos los segmentos.

El Skoda Fabia Combi ya llega a su tercera generación y, digamos, que alcanza su plena madurez. Este modelo comparte con el Skoda Fabia de cinco puertas todo hasta el pilar central, distancia entre ejes incluida. Es en el voladizo trasero donde se incrementa su longitud en 26,5 centímetros (hasta alcanzar un total de 4,26 metros).

Un maletero récord

Esto le permite «firmar» un volumen de maletero de 530 litros, o lo que es lo mismo, prácticamente 100 litros más que sus rivales directos, leáse Seat Ibiza ST o Renault Clio Sport Tourer. Y si necesitamos más, abatiendo los respaldos y las banquetas traseras ofrece hasta 1.395 litros, aunque la superficie de carga no queda plana.

En esa auténtica «cueva» encontramos detalles como un estor cubre-equipaje que se repliega con sólo darle un toque, una toma de corriente, ganchos para bolsas, un doble fondo y hasta una rueda de repuesto.

Los motores son todos conocidos

Bajo el capó la eficiencia de sus motores ha provocado que el consumo medio se reduzca en un 17 por ciento. La gama es conocida, ya que se trata de la misma que incorpora el «hatchback», salvo la variante de acceso en gasolina de 60 CV.

Por lo tanto, pone en liza tres propulsores de gasolina con potencias que oscilan entre los 75 y los 110 CV, y otros tres diésel, todos ellos 1.4 TDI, con 75, 90 y 105 caballos. El primero corresponde a la variante GreenLine, que presume de un consumo medio de 3,1 litros.

A nadie le extraña ya la incorporación de las mecánicas con tres cilindros, que hacen «pleno» en el caso de los TDI y se contempla en la variante 1.0 MPI de 75 CV, el único atmosférico. Para el cambio ganan por «goleada» las cajas manuales de cinco relaciones, si bien las variantes TDI 90 CV y el TSI de 110 CV también se pueden combinar con un DSG de doble embrague y siete relaciones.

Como ocurre con su hermano menor, el Fabia Combi nace desde una nueva plataforma que le permite acceder a nuevas tecnologías en materia de seguridad, pero no es la modular transversal (MQB) que sí incorpora, por ejemplo, el Octavia.

Más ligero que antes

Delante apuesta por un esquema McPherson, mientras que en la zaga monta un brazo de torsión. Para neutralizar el mayor peso (24 kilos más que el Fabia) y su mayor capacidad de carga, los muelles y amortiguadores traseros se han revisado con unos tarados algo más firmes. Y a todo esto hay que añadir un ahorro en la báscula de hasta 61 kilos respecto a la generación anterior (pese a ser 10 centímetros más largo).

Tuvimos ocasión de rodar con el nuevo Fabia Combi por carreteras francesas y lo cierto es que al volante convence porque el tacto general es muy agradable, la dinámica es muy sólida y el salto cualitativo dado en el interior ha sido considerable.

Comenzamos con la versión 1.2 TSI de 90 caballos, un motor sumamente refinado y con un capacidad de recuperación sorprendente. Nos gustó más que el 1.4 TDI con la misma potencia y un rendimiento notable, pero su naturaleza tricilíncrica le pasa factura en sonoridad y vibraciones respecto al TSI.

Tecnológicamente suma puntos al contemplar ahora elementos como un detector de fatiga del conductor, un control de presión de neumáticos, un asistente de arranque en rampa, un aviso de colisión con función de frenada de emergencia en ciudad, acceso y arranque sin llave, freno anticolisión múltiple, sensores de luces y lluvia…

El Fabia Combi llegará en abril, salvo el GreenLine, que lo hará a finales de año. Costará 800 euros más que el Fabia. Con descuentos y plan PIVE comenzará en 10.400 euros.