Las plazas de garaje también son frecuentemente ocupadas de forma ilegal. Es algo que no esta contemplado en la polémica ley de vivienda recientemente aprobada en el congreso, pero que si supone el allanamiento ilícito de una propiedad privada.
Ante estas circunstancias, que bien pueden derivarse de acciones involuntarias o de intenciones dolosas, los propietarios de las plazas de garaje han de saber como actuar, de forma que sus intervenciones, no supongan mas daño o perjuicio propio.
La ocupación de plazas de garaje al descubierto
La ‘okupación’ vuelve a acaparar titulares. Y todo a raíz de la aprobación tanto en el Congreso como en el Senado de la Ley de Vivienda. Una de las novedades más relevantes de la norma tiene que ver con la ocupación ilegal “en situaciones de vulnerabilidad” y los desahucios.
La controversia que suscita el texto legal aprobado, tiene su raíz en la necesidad que exige al demandante de la ocupación para demostrar, por un lado el desamparo social que manifiesta el ocupador, y de otro que, la vivienda ocupada no es el domicilio habitual de quien esta siendo demandado por la invasión, presuntamente ilegal del bien transgredido.
Presuntamente, porque el estado de derecho otorga la inocencia de quien es acusado mientras no se demuestre lo contrario. Es decir, el acusador ha de demostrar la culpabilidad del denunciado. En este caso es precisamente el propietario el más indefenso.
