Ha sido la propia firma de Sant'Agata Bolognese la que ha creado este singular prototipo sobre la base de un deportivo Lamborghini Huracan Evo.
Bautizado con el apellido 'Sterrato' que si lo traducimos al español es algo así como 'suciedad', hereda los conocimientos adquiridos por la firma italiana en la creación de su singular Lamborghini Urus, pues han convertido a este bólido en una criatura con la que disfrutar de igual forma tanto dentro, como fuera del asfalto.
Para mejorar la capacidad off-road de un deportivo que tan sólo mide 1,16 metros de alto, se ha instalado una suspensión optimizada hasta el punto de incrementar su altura libre al suelo en 47 milímetros. Así se mejoran considerablemente los ángulos de ataque, ventral y de salida en este caso tan particular.
Con las protecciones pertinentes
Para proteger su carrocería, este Lamborghini Huracan Sterrato recurre a diferentes molduras creadas en material plástico y en fibra de carbono, como pueden ser sus pasos de rueda, los cuales también incrementan su anchura en 30 milímetros y sirven para acoger sus nuevas llantas de 20 pulgadas, equipadas con gomas off-road.
Por cierto, todos los bajos del vehículo también se revisten con placas de aluminio que protegen sus componentes mecánicos de posibles golpes al circular fuera del asfalto, mientras que conducir por pistas en mitad de la noche será pan comido gracias a los nuevos proyectores LED que aparecen en su paragolpes delantero y en el techo, estos últimos colocados sobre unas barras longitudinales que también permitirán colocar un soporte para transportar los utensilios necesarios en aventureras travesías.
Aunque no hay imágenes de su habitáculo, aseguran que este prototipo cuenta con un piso en aluminio, asientos con estructura de carbono y un tapizado específico, cinturones de cuatro puntos y una jaula de seguridad fabricada en titanio.
Proporciona 640 CV de potencia
Mecánicamente no hay sorpresas, pues en la parte central se coloca el conocido 5.2 V10 atmosférico con 640 CV de potencia, enviados directamente a sus cuatro ruedas por medio de un control de tracción modificado para la ocasión. Por cierto, esta criatura también cuenta con dirección a las cuatro ruedas.
Curiosamente decir que no es la primera vez que se crea un Lamborghini con una mayor capacidad off-road. Y no nos estamos refiriendo al Urus o a su antecesor, el LM002. El piloto Bob Wallace ya modificó en 1973 y 1974 un Lamborghini Jarama y un Lamborghini Urraco respectivamente para competir en pruebas en el desierto, de igual forma que el artesanal carrocero italiano Italdesign nos sorprendió en el Salón de Ginebra del año 2013 con el particular Parcour, un deportivo adaptado para la conducción off-road que tomaba como punto de partida un Lamborghini Gallardo.
