comscore

La etiqueta ECO de la DGT y sus grandes ‘injusticias’

La electrificación nos está cambiando la vida y nos arrastra hacia un escenario complicado para muchos conductores. Los coches eléctricos son caros y no todo el mundo tiene posibilidad de instalar un punto de carga en casa. Nos queda la opción de comprar un vehículo con etiqueta ECO, una alternativa más accesible por precio y uso. Sin embargo, la etiqueta ECO no goza de una reputación demasiado ‘honrada’ en algunos casos. Veamos la razón.

Tecnologías para lograr la etiqueta ECO

Para adquirir un vehículo con etiqueta ECO debemos pensar en la tecnología híbrida autorrecargable, también en los PHEV con menos de 40 kilómetros de autonomía eléctrica (apenas hay), vehículos impulsados con gas natural o GLP y, aquí está la ‘trampa legal’, los híbridos ligeros o ‘mild hybrid’.

Tecnología mild hybrid

Ojo, no es que las marcas estén desarrollando coches específicos para conquistar este sello sin más. El problema es que en España no se mide en función de las emisiones o partículas contaminantes de cada vehículo, aspecto que sí se hace en otros países de nuestro entorno, como Alemania o Francia, por ejemplo.

En España basta con cumplir con los requisitos anteriormente citados para lograr el sello ECO. Y eso trae consigo grandes injusticias y llamativas comparaciones, que son odiosas. Vamos a centrarnos en las tres marcas Premium alemanas que, repetimos, no desarrollan coches específicos para conquistar el sello ECO…, pero en nuestro país les viene Dios a ver.