Este Seat 600 de las imágenes tiene pantalla táctil, control de luces automático y funciona con electricidad. Una transformación que ha sido posible gracias al trabajo de doce estudiantes del colegio San Patricio de Madrid, que decidieron convertir este modelo de combustión en un coche eléctrico. A la vez, esto les ha permitido conocer más de cerca la historia de este querido utilitario que motorizó la España de los años 50 y que hoy sigue teniendo numerosos fans.
El reto lo propuso Manuel Amor, el profesor de la asignatura de Tecnología Industrial del centro educativo, quien pensó que el proyecto sería una buena forma de motivar a sus alumnos. El tamaño y el reducido peso del Seat 600 inclinó la elección hacia este icónico utilitario. Era perfecto porque al pesar poco se necesita menos batería y un motor más pequeño», ha explicado el profesor.
Nuevas piezas
Los alumnos necesitaron 150 horas de trabajo para convertir este modelo de gasolina en un coche de cero emisiones. En total, instalaron en el coche 10 piezas nuevas y tuvieron que crear todas las piezas de acoplamiento del motor desde cero. La unión de la caja de cambios con el motor fue uno de los principales retos a superar.
Además, en la recta final, cuando ya tenían todo montado y solo faltaba entregar el proyecto «empezó a salir humo. Pensamos que ya estaba todo perdido. Por suerte, decidimos no tirar la toalla. En ese momento revisamos las conexiones, vimos lo que estaba mal y sustituimos el fusible que se había quemado», concluye el profesor.
