Quién no se ha mareado alguna vez yendo en coche de acompañante. Marearse en coche es algo normal, que nos ha ocurrido a casi todos, consecuencia del movimiento.
Pero marearse en coche no debe suponer una barrera, un problema que nos impida movernos y realizar nuestros viajes habituales a bordo de un automóvil. Aunque hay personas más sensibles a marearse, especialmente los niños, hay una medidas que podemos tomar para que no suceda o paliar al máximo esta desagradable circunstancia.
Actitudes negativas que llevan a marearte
Hay personas más proclives a tener sensación de mareo al desplazarse en coche, que probablemente también lo sean cuando viajan en otros medios de transporte en movimiento, como puede ser un avión o especialmente un barco. Y es que al estar en movimiento mientras tú te desplazas dentro del vehículo, se produce una disonancia entre el cuerpo y el escenario por el que transcurre que conlleva a un desequilibrio en las señales que recibe el cerebro y los oídos, que son los órganos que regulan el equilibrio. Es la cinetosis común.
Pero independientemente de ser más sensible a marearte en coche, la actitud en el coche incide directamente en ello. Los niños, los adolescentes y las embarazadas son los más sensibles a los mareos, especialmente si viajan en las plazas posteriores. Y es que los primeros rara vez miran hacia delante y siguen el recorrido de la carretera. Normalmente van jugando, con la atención puesta en lo que les rodea dentro del coche. Y, sobre todo, viendo imágenes o leyendo a través del móvil u otro soporte, lo que acentúa esa disonancia entre el cerebro que con esta actitud intuye que estás parado y el oído, que sí capta el movimiento.
Entonces llega esa desagradable sensación de mareo, que suele estar acompañada por sudores y calor interior y que puede acabar en náuseas y vómito, denominada técnicamente como cinetosis común.
Trucos para no marearse en el coche
Hay personas poco proclives a marearse, mientras otras son mucho más sensibles. En cualquier caso, poniendo atención en una serie de cuidados sencillos, nuestros trayectos serán más confortables:
- 1. Temperatura adecuada:
Llevar una temperatura adecuada en el interior del coche es primordial por nuestra seguridad y confort. Y también en este caso, para prevenir marearnos. El exceso de calor normalmente lleva a la desagradable sensación de la cinetosis. La temperatura recomendable en el habitáculo de nuestro vehículo estará entre 20 y 22ºC, lo que nos permite, además, llevar ropa ligera.
- 2. Sentarnos en el asiento del copiloto:
Al acoplarnos delante siempre tenemos una mejor visión de la carretera para que nuestro cerebro se adapte al movimiento, además de disponer normalmente de una mejor ventilación a través de los aireadores.
En caso de niños, no olvidar nunca que hasta una altura de 1,36 m. deben viajar siempre con su sistema homologado de retención.
En caso de sentarse en los asientos traseros, la plaza central es la más segura para viajar y la que ofrece un mayor ángulo de visión para mirar lo que ocurre por delante del vehículo.
- 3. Viajar en el sentido de la marcha:
Esto es algo esencial y que en el caso de un adulto o niño mayor puede ocurrir al desplazarnos en una furgoneta o autobús. Por ello, si eres sensible a marearte, busca siempre un asiento colocado mirando hacia delante. Sólo los bebés, por cuestión de seguridad en su sillita infantil adaptada a su peso y tamaño, podrán viajar en sentido contrario a la marcha y no se verán afectados. Y siempre con el sistema de retención bien fijado.
- 4. Ir bien sentados y con la cabeza erguida:
Una buena posición nos permitirá viajar de manera más confortable y con la vista al frente, hacia la carretera o fijando un punto en la lejanía.
- 5. Bajar la ventanilla:
Una medida habitual cuando tenemos los primeros síntomas es la de bajar la ventanilla del lado de la persona afectada para que le entre aire fresco directamente a la cara.
- 6. Hidratarnos bien:
Durante un viaje es importante beber líquidos de manera regular como una medida que nos ayudará a evitar el mareo.
- 7. Comidas ligeras:
Es recomendable ir con el estómago lleno porque ayuda a no marearse. Pero siempre que la comida sea ligera. Obligarnos a una digestión pesada no favorecerá un viaje apacible.
- 8. Planificar la ruta:
En ciertos trayectos podremos elegir una ruta alternativa por carreteras menos transitadas que nos permitan llevar un ritmo más regular y evitar zonas con más curvas, donde es más habitual llegar a marearse.
También podemos seleccionar, si planificamos con antelación el viaje, la hora de salida. Viajar de madrugada implica que la mayoría de pasajeros vayan durmiendo, con lo que evitarán marearse.
- 9. Cerrar los ojos y relajarse:
Por lo menos a ratos, en las zonas donde la carretera es más virada, los ojos cerrados y relajarte son dos maneras de hacer frente a los mareos.
- 10. No leas en marcha:
Ya lo hemos comentado. Leer o mirar la pantalla de tu smartphone en marcha es comprar papeletas seguras para sufrir los desagradables síntomas de la cinetosis.
- 11. Conducción suave:
El conductor puede ayudar si realiza una conducción suave, abriendo al máximo los virajes para suavizar el paso por curva dentro de los márgenes de su carril para suavizar las inercias. Lo mismo a la hora de acelerar o frenar; hacerlo de una manera regular y progresiva hará que las fuerzas gravitales se sientan de la menos manera posible.
- 12. Ayudas externas:
Antes de viajar, si normalmente un niño o adulto se suele marear sí o sí, para hacer su viaje más placentero, los antihistamínicos de primera generación ayudan a combatir el mareo y suelen inducir al sueño. La Biodramina es una ayuda habitual desde hace muchos años.
Las revolucionarias gafas Seetroën contra el mareo
Citroën, en su investigación contra el “mal de los transportes” ha desarrollado unas revolucionarias gafas. Denominadas Seetroën utilizan una revolucionaria tecnología desarrollada por la start-up francesa Boarding Ringque ofrece una eficacia del 95%.
Esta tecnología se basa en un líquido azul, que se mueve dentro de los anillos situados alrededor de los ojos, en el eje frontal y en el eje sagital (delante/atrás). De este modo, las gafas recrean la línea del horizonte para resolver el conflicto sensorial que causa los mareos. Y la mente vuelve a sincronizarse con el movimiento percibido por el oído interno.
Al notar los primeros síntomas de mareo, las gafas actúan paliando totalmente el efecto en sólo 12 minutos. Las gafas Seetroën las pueden utilizar adultos y niños a partir de 10 años –el oído interno alcanza su máximo desarrollo–. No tienen cristales, lo que permite compartirlo con otros familiares o compañeros de viaje, o encima de otras gafas.
Citroën recurrió a 55 Studio para su diseño, creando estos anteojos de ‘look high-tech’, en un material plástico suave al tacto. Su precio es de 99 euros.
