Hay finales que se ven venir desde lejos. La ‘Renaulution’ siempre fue el verdadero plan. Eliminar el excedente y que todo lo que continúe en el Grupo Renault aporte valor. Esto es más que necesario ahora para Luca de Meo, responsable del Grupo, porque la crisis de los microchips, que provocó que en 2021 dejaran de fabricar 500.000 vehículos, y la invasión rusa a Ucrania, ha tenido consecuencias directas para la marca… en la que los cerca de 20 millones de euros de sueldo de Fernando Alonso empiezan a sobrar.
Ante esta situación, el bicampeón español se ofrece a otros equipos, seduciéndoles con propuestas, incluso, que hasta ahora no habían salido de su boca: «No hay muchos pilotos número 1 o número 2 ahora mismo. Los equipos necesitan que los dos pilotos trabajen juntos para mejorar el coche. Con las nuevas reglas, aprendes mucho de cada vuelta y debes trabajar para mejorar el coche. Veremos cuáles son las posibilidades para los próximos años», dijo, recientemente. Ya sea como cabeza de ratón o cola de león, nuevos aires para él son posibles, pero siempre dentro de la Fórmula 1.
4Alfa Romeo, gris tirando a negro
Si se sondean opciones en función de la fecha de expiración de los contratos, el nombre de Guanyu Zhou debe salir a la palestra. El rookie está lejos de su experimentado compañero, Bottas, pero se antoja complicado que salga del equipo porque sigue contando con crédito de sobra para ganarse la confianza de cara a futuras campañas.
Aunque haya optimistas que se atrevan a colocar a Alfa Romeo como actual tercer equipo de la parrilla, el vaso estaría medio lleno en esa interpretación. Este equipo, comparsa de Ferrari, no tiene grandes aspiraciones ni un proyecto suficientemente interesante más allá del retiro dorado al que viene agenciándose la representación finlandesa de la Fórmula 1 tras la salida de la máxima competición hace escasos meses de Kimi Räikkönen, que ahora mira a la Nascar.
