Todos sabemos que el mero hecho de comprar un coche es algo que supone un gasto bastante importante pero en el caso de que lo asumamos somos conscientes de que tendremos que cuidarlo.
Y en este artículo vamos a comentar el peligro de lavar tu coche cuando hace frío debido a que hay quien piensa que no va a ocurrir nada pero realmente no es así.
Se sabe que una de las pesadillas de todo conductor es la corrosión que se produce en algunas ocasión además del tema de la oxidación que pueden llegar a perjudicar mucho.
1Es conveniente realizar una limpieza que sea periódica
Es cierto que los vehículos que son nuevos suelen salir de la fábrica por medio de tratamientos que son anticorrosivos.
Pero, aún así, es conveniente que se lleve a cabo un mantenimiento de forma constante del mismo y sobre todo en la época de invierno.
Hay que tener en cuenta que, tanto la nieve, como el frío o la sal de las carreteras pueden llegar a afectar de forma negativa el funcionamiento del coche.
Por esta misma razón se suele recomendar prevenir haciendo uso de tratamientos que son anticorrosivos o limpiar el vehículo de una forma periódica tras las nevadas.
Lo ideal sería realizar la limpieza del vehículo después de haber conducido por una carretera que se encontrara llena de nieve o de hielo.
Hay que tener en cuenta que, cuanto más tiempo se encuentre el coche lleno de sal incrustada mucho mayor va a ser la forma en la cual afectará a la pintura.
Habrá que limpiar con agua la carrocería aunque tendremos que poner especial atención en la zona de las ruedas además de los bajos del vehículo.
Esto se realizará así con el fin de poder eliminar toda la sal existente que haya dentro de las llantas además de los espacios inferiores.
Se pueden probar las pistolas de agua a presión ya que pueden ayudar a que se limpie correctamente dichas zonas con el fin de poder disolver toda la sal que haya incrustada.
