Con la nueva Serie 5 de BMW ya estrenada, la marca bávara se encuentra en plena fase de desarrollo del modelo más deportivo de la gama, el M5. En su séptima generación, esta superberlina romperá todos los récords de potencia gracias a la electrificación, que llegará por primera vez a este modelo.
A lo largo de su historia, el M5 se ha ganado a pulso la fama de ser una de las mejores berlinas de altas prestaciones del mundo. El primer M5 llegó con la generación E28, y compartía motor 3.5 atmosférico de seis cilindros en línea de 286 CV con el mítico M1. La segunda entrega, lanzada en 1988, conservó el mismo bloque, aunque con la potencia incrementada a 315 CV; posteriormente vería aumentada la cilindrada 3.8 litros y la potencia llegó a 340 CV.
El M5 E39, de 1998, equipó un bloque 4.9 V8 atmosférico que entregaba 400 CV; sería el último M5 con cambio manual comercializado en Europa. El siguiente (E60) es, probablemente, uno de los más especiales, ya que supuso el fin de los motores atmosféricos en este modelo. Y lo hizo a lo grande, con un 5.0 V10 con tecnología procedente del equipo BMW Sauber de Fórmula 1. La ganancia de potencia fue espectacular, llegando a los 507 CV. Contaba con una caja manual automatizada SMG de siete velocidades, aunque en Estados Unidos también se ofreció con una manual.
Llegamos al M5 F10, el primero equipado con turbo, que nació con 560 CV absolutamente salvajes, aunque su motor 4.4 V8 llegó a los 600 CV en diferentes ediciones. Fue el último M5 con tracción exclusivamente al eje trasero, ya que le siguiente (F90, basado en la generación G30 del Serie 5) incorporó tracción total por primera vez en su historia (eso sí, desconectable a voluntad del conductor). Hubo una versión CS con 635 CV y capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 3,0 segundos, el M5 más potente y rápido fabricado hasta la fecha.
Y llega la electrificación al M5
Ahora hemos podido ver las primeras imágenes del M5 de la recientemente lanzada generación G60 del Serie 5 que, por primera vez, incluirá un sistema de propulsión electrificado. Si bien aún no hay datos oficiales al respecto, es prácticamente seguro que será muy semejante al empleado en el BMW XM, es decir, un híbrido enchufable que combina el motor 4.4 V8 biturbo S68 con una unidad eléctrica.
En el caso del SUV, esta combinación es capaz de desarrollar hasta 748 CV en la versión Label Red, que le convierten en el BMW más potente de la historia. No sería de extrañar que el nuevo M5 incluso supere dicha cifra, sobre todo vistas las intenciones de la competencia. Sin ir más lejos, Mercedes-AMG ya tiene a la venta el GT 63 S E Performance 4 puertas que desarrolla 843 CV de potencia, un sistema híbrido enchufable que también está disponible en el Clase S, con 802 CV y 1.430 Nm de par. Y, a bien seguro, uno de los dos llegará al Clase E, el gran rival del Serie 5.
Desde el punto de vista estético, el M5 estará claramente diferenciado del resto de la gama. En las imágenes ya se aprecian con cierta claridad los nuevos paragolpes, que irán acompañados de una carrocería ensanchada y unas llantas específicas. Se mantendrán las cuatro salidas de escape, dos a cada lado del paragolpes flanqueando un difusor.
También habrá un M5 familiar
Además, todo apunta a que BMW extenderá este modelo a la carrocería familiar, al igual que en el M3; a diferencia de este, no será la primera vez, puesto que ya hubo un M5 Touring en la segunda generación (E34) y en la cuarta (E60). Su llegada se demorará unos meses más que la de la berlina, que está prevista para inicios de 2024.