Parece que todo conductor, casi por decreto, ha tenido que padece alguna multa a lo largo de su vida. Pues no es así. Librarte de las multas es posible aunque no te lo creas. De hecho, el riesgo de la mayoría de ellas se reduce a cero con un poco de información… y, por supuesto, de prevención.
Muchas veces lo habrás pensado: «Esa maldita multa de tráfico, tan injusta, no me la habrían puesto si no…». Para eso estamos, para ofrecerte en estas líneas algunas pautas a seguir en cada tipo de multa y que no te tengas que llevar las manos a la cabeza cuando sea demasiado tarde.
5En las multas, las apariencias importan
Siempre nos dejamos guiar por las apariencias, los agentes no son una excepción. Ante un control aleatorio, echan un vistazo, y deciden: si vais varios en el coche, gritando, con la música alta… tenéis todas las papeletas. Contáis con un alto grado de posibilidades de multa: alguno puede ir borracho, incluso el conductor, no lleváis puesto el cinturón de seguridad…
¿Quién va a pensar mal de una mujer embarazada o un chico solo, formalote y con pinta de salir de trabajar? Mantener un perfil bajo y ser discreto siempre te va a ayudar a reducir las posibilidades de que te caiga una buena multa en este tipo de situaciones.
