Parece que todo conductor, casi por decreto, ha tenido que padece alguna multa a lo largo de su vida. Pues no es así. Librarte de las multas es posible aunque no te lo creas. De hecho, el riesgo de la mayoría de ellas se reduce a cero con un poco de información… y, por supuesto, de prevención.
Muchas veces lo habrás pensado: «Esa maldita multa de tráfico, tan injusta, no me la habrían puesto si no…». Para eso estamos, para ofrecerte en estas líneas algunas pautas a seguir en cada tipo de multa y que no te tengas que llevar las manos a la cabeza cuando sea demasiado tarde.
Aléjate del carril rápido
Aunque pueden centrarse en cualquier punto, las cámaras normalmente están atentas sobre todo al carril rápido, ya que lo usamos para adelantar y es cuando más solemos sobrepasar el límite de velocidad. Las prisas y la conducción no son buenas compañeras, así que la recomendación es clara: sal con tiempo, y mantén la calma todo lo posible, porque alejarte del carril es alejarte de la multa. Úsalo, pero cuando lo hagas hazlo de la manera adecuada.
