Parece que todo conductor, casi por decreto, ha tenido que padece alguna multa a lo largo de su vida. Pues no es así. Librarte de las multas es posible aunque no te lo creas. De hecho, el riesgo de la mayoría de ellas se reduce a cero con un poco de información… y, por supuesto, de prevención.
Muchas veces lo habrás pensado: «Esa maldita multa de tráfico, tan injusta, no me la habrían puesto si no…». Para eso estamos, para ofrecerte en estas líneas algunas pautas a seguir en cada tipo de multa y que no te tengas que llevar las manos a la cabeza cuando sea demasiado tarde.
Cuando te hacen un test de alcoholemia
Es difícil pero todo el mundo puede equivocarse… incluso a la hora de hacer un test de alcoholemia. Si ese es tu caso, recuerda que tienes derecho a pedir dos controles más al agente que te haya pedido detenerte. Mucha gente desconoce todo esto pero incluso tienes la opción de hacerte un análisis de sangre en el hospital. Eso sí, si sigues dando positivo, deberás pagarlo.
¿Qué puedes hacer si nada de esto funciona? Lo tienes mucho más complicado pero al menos puedes recurrir la multa durante los siguientes 20 días naturales. Menos es nada. Y si tampoco consigues tu propósito, puedes poner un recurso de reposición.
