La marca del óvalo azul acaba anunciar que utilizará grafeno (material utilizado en revestimientos, teléfonos móviles o en artículos deportivos) en piezas y componentes de sus vehículos. Se espera que entre en producción a finales de año en piezas para el Ford F-150 y del Mustang.
Aunque no es un material económico, Ford, en colaboración con Eagle Industries y XG Sciences, lo empleará en pequeñas cantidades en cubiertas de conducciones de combustible, cubiertas de bombas y cubiertas delanteras de motor.
200 veces más resistente que el acero
Se trata de un material que es 200 veces más resistente que el acero y es un gran conductor. Extremadamente fino y flexible, es una gran barrera de sonido.
La jefa técnica senior de sostenibilidad y materiales emergente de Ford, Debbie Mielewski, ha asegurado que «somos capaces de utilizar una cantidad muy pequeña, menos del 0,5 %, para lograr mejoras significativas en la durabilidad, la resistencia del sonido y la reducción del peso, aplicaciones en las que otros fabricantes no se han centrado».
El grafeno se mezcla con componentes de espuma y según las pruebas realizadas por Ford, se demuestra una reducción del ruido del 17%, un mejora del 20% en las propiedades mecánicas y una mejora del 30% en las propiedades de resistencia al calor.
