Las nuevas Tourneo Connect Active y Transit Connect Active aterrizan con una preparación especial, para adaptarse a entornos de trabajo más duros. Con un estilo exterior inspirados en un SUV, cuentan con un diferencial de deslizamiento limitado mecánico opcional (mLSD) con lo que mejoran en tracción, así como una suspensión elevada. Además, se ofrecen acabados interiores exclusivos y lo último en tecnología.
Con cinco versiones diferentes y siete asientos, el Tourneo Connect Active ofrece comodidad para días de campo o viajes largos, mientras que la Transit Connect Active está pensada para clientes de negocios o de doble uso. «No importa si es por negocios o por placer, estos nuevos modelos tienen la flexibilidad y la capacidad de aportar a los clientes una sensación de aventura», ha asegurado Hans Schep, director general de Vehículos Comerciales de Ford en Europa.
Aumento del rendimiento
Gracias a la tecnología mLSD, desarrollada en colaboración con los especialistas en tracción Quaife, se consigue una tracción óptima. Transfiere de forma automática el par motor en momentos de poco agarre a la rueda con más tracción, lo que ayuda en superficies difíciles. Además, ambos modelos aumentan su altura de marcha en 24 mm en la parte delantera y 9 mm en la zaga.
A nivel mecánico, todos los modelos están impulsados por el motor diésel EcoBlue de 1.5 litros de la marca con inyección de combustible avanzado, turbocompresor y tecnologías de control de emisiones con un diseño de baja fricción. Disponible con 100 o 120 CV, está asociado a una transmisión automática de ocho velocidades o a una manual de seis.
