En este caso, perder o romper la etiqueta medioambiental, con unas leyes casi en mantillas, va a depender de donde te ocurra esto. Seamos claros. No es obligatorio llevar este distintivo de forma general por todas la carreteras y ciudades de España. La ley es clara solo en ciertos aspectos y para otros simplemente no hay ley o esta en proyecto.
Y es que todo depende de la famosa ley de cambio climático, desde la que se insta a los ayuntamientos a adoptar las medidas necesarias en sus ordenanzas, para regular el trafico por sus calles y viales. Mas concretamente, estableciendo zonas de bajas emisiones, por las que se deberá circular con vehículos que cumplan los requisitos, estos si obligados, en cuanto a emisiones de gases de efecto invernadero.
La etiqueta medioambiental, asunto municipal
Pero hete aquí, que la ley para la regulación de estas zonas de descontaminación de las ciudades, se halla en proyecto y aun tiene que ser aprobada.
Por otra parte, los grandes municipios de España (capitales de provincia, hace años Madrid y Barcelona) es obvio que necesitan adecuar todas estas medidas de forma progresiva y en el tiempo, por su volumen de habitantes y trafico de vehículos. De ahí se desprende la prioridad de la DGT por la catalogación de los coches de mas a menos contaminantes, que se hacia necesaria, para no precarizar el sistema ideado políticamente.
Recuerda la polémica entre políticos madrileños hace unos pocos años, respecto de Madrid Central y M-30. Al margen de estos, la guardia civil necesitaba poder distinguir los coches, sin tener que pararlos y poder analizar así, los gases de forma técnica y precisa. Y es ahí cuando aparecen las famosas pegatinas medioambientales.
