El sistema de pila de combustible del Toyota Mirai se ha montado en un minibús Coaster para equipar la primera clínica móvil propulsada por hidrógeno. Se pondrá en marcha en Japón este verano gracias a la iniciativa de Toyota y el Hospital Kumamoto de Cruz Roja y servirá para asistir a los afectados en casos de catástrofes naturales, etc.
Una de las grandes ventajas de esta clínica móvil es que el sistema de pila de combustible podrá servir también para suministrar electricidad de forma externa a las zonas afectadas por alguna catástrofe. Además, en su interior, combina aire acondicionado con un sistema de escape y un filtro Hepa, que purifica el aire para prevenir infecciones como la del coronavirus.
Las pruebas piloto que se están realizando con esta clínica móvil revelan que, además la atención a los pacientes o el transporte de los enfermos a centros hospitalarios, la clínica podría alcanzar un gran potencial para suministrar energía y también podría servir como vehículo de donación de sangre o de revisiones médicas o para suministrar energía a este tipo de vehículos e incluso para realizar pruebas de PCR en zonas despobladas.
No es la primera vez que Toyota colabora con Cruz Roja. Aquí en España, esta Navidad puso en marcha un proyecto para fomentar la movilidad entre las personas mayores durante las fiestas. También, coincidiendo con la Navidad, la red oficial de concesionarios de la marca en la Comunidad de Madrid se sumó a una acción solidaria de donación de sangre.
