Cuando llega la gota fría los telediarios suelen llenarse de imágenes de calles inundadas, coches completamente cubiertos de agua, vehículos siendo arrastrados por la corriente… Unas imágenes catastróficas e irreversibles. Seguro que alguna vez te ha surgido la duda de qué pasa con esos vehículos inundados ¿son irrecuperables?
Pues en la mayoría de los casos y lamentándolo mucho, sí. Una inundación es una de las perores cosas que le pueden pasar a tu vehículo. No solo porque les entre agua a todos sus componentes, sino también porque hay que tener en cuenta que el agua de las riadas está llena de suciedad y partículas, lo que hace aún más difícil la recuperación. Dependiendo del nivel al que ha llegado el agua, quizás consigas salvarlo tras unas muy costosas reparaciones.
Reclamar al seguro
Los seguros no cubren los daños por catástrofes naturales. Sólo si tienes el coche a todo riesgo desde hace más de un mes podrás recurrir al Consorcio de Compensación de Seguros. Si lo tienes a terceros puedes esperar a que el gobierno declare zona catastrófica e intentar acogerte a ayudas, si las aprueban. Si se debe a un problema de alcantarillado de la ciudad podrás intentar reclamar al ayuntamiento correspondiente.
Si el coche se te inunda en un parking privado o público, los daños son igual de graves que en una riada. Sólo que en este caso podrás reclamar al propietario del aparcamiento por si su seguro cubre los daños.
