La verdad es que RUF lleva años siendo responsable de muchos de los más salvajes, bellos y llamativos modelos basados en el Porsche 911 que podemos encontrar en el mercado. Buena prueba de ello es este modelo del 97: un RUF CTR2 Sport; un coche que se basaba em el 993 pero que esconde bajo el capó un monstruoso motor capaz de generar 711 caballos.
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Este modelo en particular es el primero de los 16 CTR2 Sport con carrocería ensanchada que fabricó RUF, y el 11º CTR2. Además, es uno de los dos únicos que se construyeron para el asalto a Pikes Peak, lo que explica las numerosas modificaciones con respecto a los CTR2 corrientes.
Para empezar, cuenta con nuevo parachoques delantero, alerón trasero doble, un pequeño alerón en el techo o un spoiler delantero. Este último, junto con las puertas, están fabricados en fibra de carbono, lo que los hace todavía más ligeros.
Pero sin duda lo más llamativo y lo que más destaca es ese bestial motor de 711 caballos. Y es que los modelos 'corrientes' del CTR2 contaban con un motor de 3,6 litros y seis cilindros proveniente del 993 Turbo, pero con turbos gemelos de mayor tamaño que hacían que el coche alcanzase los 525 caballos. Sin embargo, la versión Sport derivada del mismo llegaba gasta los 711 CV, lo que es más que terrorífico si pensamos además que es un coche de los años 90.
Pues esta verdadera joya ya tiene nuevo hogar. Ahora bien, a su nuevo propietario no le ha salido nada barato hacerse con el, porque ha tenido que desembolsar la friolera de 682.000 euros.
