Kylian Mbappé se está forjando una gran fortuna como futbolista en el Paris Saint-Germain. La última renovación sumó muchos cientos de millones a la cuenta de este ídolo de masas, que pese a sus recientes resultados deportivos, sigue siendo considerado uno de los mejores futbolistas del mundo.
Sin embargo, todo el dinero del mundo y toda su influencia, no son suficientes para cumplir uno de los sueños de niño del futbolista. Kylian Mbappé anhela tener un Ferrari. El francés se debate entre un Ferrari 488 Pista o el modelo Ferrari SF90 Stradale, pero la empresa que se encarga de distribuirlos se niega a vendérselos por un pequeño detalle.
Ferrari mira con lupa a sus compradores
Ferrari cuida mucho su marca y mira con lupa a sus compradores a la hora de permitirles comprar nuevas adquisiciones. Por ejemplo, cuentan de un modo positivo que la persona que posee el Ferrari acuda con él a eventos importantes. Este tipo de comportamientos permiten a sus compradores ascender en el ranking para tener acceso a pagar por los modelos más exclusivos que la marca va sacando al mercado. Generalmente solo fabrican dos modelos nuevos año.
Un comportamiento negativo, que supondría quedarse fuera de la órbita de la marca, es modificar el Ferrari. Por mucho que hayas pagado, a Ferrari no le gusta que se modifiquen sus creaciones, o que se utilicen solo para presumir de estatus. A los conductores que realizan este tipo de prácticas, les borran de la lista de futuros compradores.
