Finaliza agosto, el mes por excelencia de vacaciones para muchos españoles, que regresan a casa y a la rutina diaria haciendo cuentas y pensando en mil maneras de ahorrar para hacer frente a la inflación. Y, aunque los precios del combustible se han moderado en los últimos días, llenar el depósito sigue suponiendo un gasto importante. De hecho, se calcula que cuesta una media de entre 16 y 23 euros más que hace un año, dependiendo de si el coche es gasolina o diésel.
No usar el punto muerto en movimiento y utilizar el motor como freno
Dejar la caja de cambios en punto muerto solamente es recomendable al detener la marcha del vehículo. En caso de realizarlo en movimiento, además de no ser eficiente y de no ahorrar combustible, puede ser peligroso ya que la única manera de detener el vehículo será frenando de modo excesivo, con lo que incluso se puede perder parte del control de la velocidad.
Para detener el vehículo no solo se puede hacer accionando el freno, sino también usando inteligentemente el motor. Levantar el pie del acelerador hará frenar el coche de manera natural, y reducir alguna marcha también permitirá que el vehículo reduzca su velocidad poco a poco sin necesidad de abusar del freno, lo que repercutirá también de manera positiva en la salud de las pastillas de freno del coche.
