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Ganvam pide a los políticos. Un programa electoral de máximos

La Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (GANVAM) reclama retomar la reforma fiscal integral del automóvil que, en línea con las directrices europeas, grave el uso y no la compra del vehículo, evitando así que se penalice la introducción de mejoras tecnológicas y la renovación del parque.

Lo recoge en un programa electoral de máximos que estructura un paquete de medidas encaminadas a revitalizar un sector cuya evolución guarda relación directa con el crecimiento del PIB.

Como una de las grandes asignaturas pendientes de la legislatura que está a punto de acabar fue articular una fiscalidad que en lugar de aumentar la presión impositiva, favoreciera a los vehículos más respetuosos con el medio ambiente, Ganvam pide retomar esta reforma con medidas como la adecuación del Impuesto de Circulación a criterios medioambientales. También, para consolidar la demanda a largo plazo, propone la eliminación del Impuesto de Matriculación, recordando que, de los grandes mercados europeos, España es el único con un gravamen de este tipo.

El programa electoral de Ganvam también contempla la supresión del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales para los profesionales que ya liquidan el IVA en sus ventas, para dar un respiro a los profesionales, dado que la ampliación de los tiempos de stock dificulta revender los usados dentro del año siguiente a la fecha de adquisición.

Mejor fiscalidad

Otra medida fiscal que se pide es la rebaja de la carga la carga impositiva de las operaciones de mantenimiento y reparación que beneficien a la seguridad vial. Al bajar el IVA de los arreglos relacionados con neumáticos, frenos o suspensión, no sólo se evitará que los conductores busquen alternativas a bajo precio sin garantías en los talleres ilegales, sino que se contribuirá a incrementar el volumen de reparaciones, contribuyendo en mayor medida con el erario público.

Se reclama que las flotas formen parte activa de las políticas de automoción, abogando por impulsar entre los particulares métodos de financiación complementarios a la compra directa, como el renting o alquiler a largo plazo, desgravando sus cuotas mensuales en el IRPF. Una iniciativa, que está en marcha en países como Holanda o Reino Unido, donde el renting entre particulares alcanza el 40%, y favorecería el cambio de coche cada cuatro años, contribuyendo a rejuvenecer un parque con un cincuenta por ciento por encima de los once años.

Continuidad de las ayudas

En esa linea de frenar el envejecimiento, Ganvam aboga por mantener los incentivo a la compra a cambio de la entrega de un vehículo para achatarrar. No supone un gasto para el Estado sino una inversión, teniendo en cuenta que por cada euro que aporta recupera tres vía impuestos.

Facilitar la financiación

En un mercado donde el 80% de las operaciones precisan financiación, Ganvam propone medidas orientadas a impulsar el crédito en la cadena de distribución, en condiciones realistas de mercado y con trámites simplificados. Además de la apertura de líneas ICO, tanto para compradores como para distribuidores, plantea facilitar la recuperación urgente de los vehículos impagados. Se reducirían los costes de financiación y de stock, evitando la depreciación acelerada de los vehículos.

Control de ITV

El programa electoral propuesto por Ganvam contempla incrementar la vigilancia y endurecer las sanciones cuando se eluda la inspección técnica de vehículos. También aboga por liberalizar el sistema para que concesionarios y talleres estén autorizados.

Stop al fraude en la venta y reparación de vehículos

La erradicación de la venta ilegal en la vía pública es una demanda histórica del sector, que el Reglamento General de Circulación recogía en su borrador inicial y debería recuperarse articulando una norma de carácter estatal que prohíba el estacionamiento con fines comerciales. Esta actividad sumergida representa ya el 10% del total de operaciones con usados que se realizan en españa (cerca de 175.000) generando unas pérdidas de 300 millones de euros anuales a los porfesionales legalmente establecidos.

La lucha contra el fraude también pasa por cercar la actividad de la reparación ilegal. Si bien la colaboración del sector con la Guardia Civil ha permitido cerrar unos 240 negocios ilegales en este año, se pide al Gobierno entrante intensificar las actuaciones para zanjar una actividad que perjudica al medio ambiente, deja desprotegido al consumidor y supone un riesgo a la seguridad vial.

La manipulación del cuentakilómetros es otra de las malas prácticas sobre la que los vendedores llaman la atención, pidiendo que sea obligatoria la anotación del kilometraje al pasar la ITV, así como su volcado telemático en el Registro Central de Vehículos o cada vez que un taller realice una intervención. Actuando la Administración de oficio si las cifras no coinciden.

Estadísticas más exhaustivas

Las peticiones de Ganvam de cara a la próxima legislatura también van orientadas a tener una información más exhaustiva en el registro de vehículos de la Dirección General de Tráfico (DGT) para tener una radiografía mucho más real del mercado y, por tanto, más control para evitar fraudes.

Para ello pide incorporar nuevos campos relativos al cambio de titularidad para saber quién compra y quién vende, también incluir los coches robados o denunciados por robo y los vehículos siniestrados.

Mayor protección al consumidor

El programa electoral de Ganvam también pide mayor protección al usuario de vehículos de segunda mano, pues, a pesar de que la normativa es muy exigente con los vendedores, la patronal solicita la puesta en marcha de un Código de Buenas Prácticas en la compra y venta de un coche usado.

Reclama a la Administración que actúe con decisión ante irregularidades como las ventas sin garantía, documentación, contrato, libro de mantenimiento… y que regule las operaciones comerciales a través de Internet para que no haya perjuicios para el comprador ni competencia desleal para el sector.

Más protección al distribuidor

Las regulación de las relaciones comerciales entre proveedores y distribuidores también es una cuestión que Ganvam considera necesario retomar. Pide que el Código de Buenas Prácticas del Sector de Automoción actúe como un verdadero instrumento de auto-regulación y solución de conflictos.

La protección al débil en los contratos de adhesión es un objetivo prioritario para la patronal de vendedores. Por la misma razón, deben desaparecer las cláusulas de renuncia a las indemnizaciones; debe haber libertad de cesión del negocio siempre que se cumplan los estándares del fabricante y la venta multimarca debe contemplarse como opción en lugar de limitarse.

Freno a la 'autofobia'

En un contexto en el que se «demoniza» injustamente el coche como principal foco urbano de contaminación, Ganvam pide al Gobierno entrante la puesta en marcha de un modelo de movilidad que adecue el uso a la necesidad en lugar de prohibir la circulación de vehículos.

Impulso a la Posventa

Por último, hay una serie de medidas orientadas a revitalizar la posventa, lastrada por aspectos coyunturales, como la antigüedad del parque, que implica menos reparaciones y de menor cuantía. En este sentido, además de campañas para promocionar el mantenimiento responsable del vehículo, reclama que se equilibren las relaciones del taller con las compañías de seguros.

Además, insta al futuro Gobierno a apoyar a los talleres en las inspecciones de consumo para que cumplan masivamente con las exigencias legales que afectan a su actividad.