Los agentes de la DGT han de poder identificar de un vistazo si los vehículos en circulación cumplen con los requisitos exigidos en las leyes y reglamentos que regulan el trafico en nuestras carreteras. Con este fin desde hace décadas las etiquetas, de la ITV, y posteriormente las medioambientales, pasan a ser el instrumento eficaz para este cometido.
Hay una de entre todas exclusiva de algunos vehículos que resulta desconocida para muchos usuarios. La etiqueta V 26 que distingue a los coches compartidos y da acceso a zonas restringidas.
1Etiquetas identificativas de la DGT
Las agendas medioambientales de la Unión Europea inciden directamente en las normas de trafico y en la movilidad. Las políticas encaminadas a descontaminar la atmosfera, obligan a que los organismos dependientes de las administraciones publicas, puedan distinguir, clasificando a los vehículos, según su potencial contaminante. Para ello inventaron las etiquetas medioambientales, hace ya algunos años, y que ahora cobran sentido, toda vez que desde primeros de 2023, las zonas de bajas emisiones entraron en vigor.
Las pegatinas más comunes que vemos colocadas en el ángulo inferior derecho del parabrisas (o en un sitio visible del vehículo en el caso de carecer de este elemento) son las Cero, Eco, B y C. Técnicamente se denominan V-25 y clasifican a los vehículos en función de sus emisiones. Quedan fuera de esta catalogación los coches que funcionan con gasolina matriculados antes del año 2000 y los vehículos diésel matriculados antes de 2006.
