Tristemente el alcohol es uno de los factores de riesgo más presentes en los accidentes de tráfico con víctimas. Se evitarían muchas muertes si todos los conductores se negaran a conducir bajo los efectos del alcohol o de las drogas. Para luchar contra esta práctica existen los controles de alcoholemia que siempre marcarán la tasa real de alcohol que ha ingerido el conductor.
Pese a que circulen muchas creencias populares sobre formas de bajar el nivel de alcohol en sangre, lo cierto es que ninguna funciona. Lo único efectivo es directamente no beber alcohol, o hacerlo en una cantidad ínfima. Muchos conductores se pregunta si una o dos cervezas son suficientes para dar positivo en un control. Intentaremos despejar esa duda.
Tasa de alcoholemia permitida en un control
La DGT quiere erradicar la conducción en estado de embriaguez, así que los márgenes permitidos en la tasa de alcoholemia cada vez son más pequeños. Los conductores normales no pueden superar los 0,5 gramos por litro en sangre (0,25 mg/L de aire espirado).
Si se trata de conductores nóveles con menos de 2 años de carné o de conductores profesionales, la cifra permitida baja 0,3 g/L de alcohol en sangre (0,15 mg/L en aire). En los menores de 18 años es directamente 0,0g/L. Las multas por conducir ebrio van desde los 500€ y cuatro puntos de carnet, hasta más de 1.000€, seis puntos y penas de cárcel. Ahora que ya sabes las cantidades permitidas, podemos entrar en materia para saber que bebidas te harán superarlas.
