Para entender el brutal crecimiento que ha sufrido Bentley en sus ventas y niveles de producción, basta con poner encima de la mesa datos tan aclaratorios como este: de sus 200.000 ejemplares desde 1919, más del 75% han sido fabricados en los últimos 18 años.
El SUV: un fenómeno
Y es que, de hecho, el 40% del total producido le corresponde al exitoso Continental GT, un modelo que debutó en 2003. El Flying Spur se queda con el 20%, habiendo debutado en 2005, y lo más sorprendente de todo es que, de esos 200.000 ejemplares en 102 años, nada menos que 25.000 han sido SUV, es decir, Bentayga, que llegó al mercado en 2015, por lo que es 12,5% del total en tan solo 6 años… De hecho, el coche número 200.000 es un Bentayga Hybrid.
Todo este acelerón se debe, en gran parte, a la absorción de la compañía por parte del Grupo Volkswagen. En el año 2002, Bentley tan solo había producido 44.418 vehículos en toda su historia. Es cierto que algunos de estos coches son auténticas leyendas, como el Blower, el Mulsanne, el Arnage o el Azure, pero la compañía hace ahora en un día lo que antes le ocupaba un mes.
Pero tampoco se piensen que Bentley ahora fabrica coches como quien hace churros, pues esto no es para nada así. Para que se hagan una idea, la compañía produce a día de hoy, 85 coches por jornada, mientras que su hermanastro Volkswagen, hace nada menos que 3.500.
