La escudería Haas ha desvelado su caballo de batallas para este 2017. Se trata del VF-17, un monoplaza al que se cazó antes de su presentación preparándose en el Circuito de Montmeló. El trazado español ha sido el escenario elegido por la formación de Gene Haas para mostrar su segundo monoplaza de Fórmula 1 antes de arrancar el trabajo en pista.
Elaborado para mejorar su primer año
Diseñado en colaboración con Dallara, el nuevo Haas VF-17 del equipo americano cuenta con la mayor carga aerodinámica que jamás haya creado el fabricante italiano. Echando un ojo a sus líneas, el nuevo monoplaza de la marca presenta un diseño muy parecido a lo que ya hemos visto hasta ahora en la nueva parrilla, con una delantera de morro alargado que termina en un alerón sobredimensionado o una zaga con «aleta de tiburón».
Quizás lo que menos sorprenda del vehículo sea su decoración, ya que el nuevo Haas VF-17 presenta una disposición muy similar al coche del año pasado. Los tonos grises y rojos son la base de una carrocería en la que el morro, la aleta de tiburón y los alerones presentan tonos rojos. Richard Mille y Windshear son los logos con mayor presencia en una carrocería en la que no falta la habitual bandera de Estados Unidos que Haas siempre coloca en sus coches.
El VF-17 contará con el nuevo propulsor de última generación de Ferrari y los encargados de pilotarlo serán Romain Grosjean y Kevin Magnussen. Con esta nueva alineación de pilotos, en la que el danés acaba de aterrizar tras su etapa en Renault, se quiere combinar velocidad y experiencia a partes iguales.
