En el aeródromo militar de Råda en Suecia, los chicos de Koenigsegg se felicitaban por lo conseguido y no era para menos, se hacen con el récord mundial de aceleración de 0 a 400 km/h y de vuelta a 0. Este nuevo récord sucede al anterior que también estaba en poder de la firma sueca desde 2017 después de que lograsen hacer esto mismo en 33,29 segundos a bordo de un Agera RS en Nevada. Ahora, el Regera sucede a su hermano y se corona como el más rápido con rebajando su tiempo en 1,8 segundos y logrando un tiempo impresionante de 31,49 segundos.