Con el final del verano, en especial este año que la sequia ha sido protagonista junto a los incendios, regresan las lluvias menudas y/o tormentosas. Las carreteras durante un largo periodo de clima seco también sufren las consecuencias. Es entonces cuando conviene recordar que debes prepararte para posibles escenarios en los que vas a conducir con ellas mojadas. La conducción en superficies húmedas es delicada y conviene tener en cuenta estos consejos por seguridad.
Ten en cuenta estos detalles previos para conducir
Las carreteras se ven afectadas en verano por los factores climáticos. Sometidas a las altas temperaturas pueden presentar defectos en su estructura. A partir de los 45 grados el asfalto sufre variaciones en el módulo de rigidez deformandose y/o agrietandose.
También almacena polvo y restos propios del desgaste de neumáticos(polvo de caucho). Y por ultimo las bandas de señalización horizontal (que vemos pintadas en el asfalto) también pueden sufrir alteraciones. La variación estructural de estos elementos son causa de los problemas cuando regresan la lluvias, ya que el agua los mezcla y crea películas que restan adherencia. La aparición entonces de charcos grandes y embalsamientos, pueden propiciar zonas en que el aquaplaning sea muy posible.
Recuerda que este año, con la ola extrema de calor en toda Europa, se han cerrado algunos tramos de carreteras en alguno países, como Holanda y Reino Unido.
