La multinacional alemana está desarrollando un proyecto que le llevará a conectar 100 puntos de carga a la red eléctrica de alta capacidad en hasta 30 estaciones de servicio de Aral, una subsidiaria del Grupo BP en Alemania. Mediante la instalación de subestaciones inteligentes, Aral dotará de esta manera a sus estaciones de servicio con tecnología de carga ultrarrápida para vehículos eléctricos.
Para que el desarrollo de la movilidad eléctrica sea una realidad, lo fundamental no sólo es disponer de una completa red de infraestructuras de carga que cubran las distintas carreteras del país, también se precisa que el proceso de carga de las baterías de cada coche que lo utilice se agilice lo más posible y permita a los usuarios continuar sus viajes demorándoles lo menos posible.
Un gran paso adelante.
«Al equipar nuestra estaciones de servicio con infraestructura de carga ultrarrápida para vehículos eléctricos estamos dando un gran paso adelante en la creación de las estaciones de servicio del futuro, al tiempo que aceleramos la implantación de la movilidad eléctrica libre de emisiones«., comento Patrick Wendeler, miembro de la junta directiva de Aral AG. «Para que la carga sea tan rápida como poner combustible en un automóvil, hemos optado por estaciones de carga ultrarrápidas, con una potencia de hasta 350 kW. Los cargadores por sí solos no son suficientes y la actualización también requiere de una conexión potente y fiable a la red eléctrica de alta capacidad. Por ese motivo, estamos contentos de tener a nuestro lado a Siemens, dada su experiencia en infraestructura eléctrica».
Actualmente, la mayoría de las estaciones de servicio tan solo disponen de conexiones de bajo voltaje a la red eléctrica y, para poder satisfacer la demanda de energía que precisan los cargadores rápidos se necesitan conexiones de voltaje medio que aportan mucha mayor energía.
Tecnologías IoT.
Esto se consigue gracias a la instalación de subestaciones eléctricas que conectan las infraestructuras de carga de las estaciones de servicio a la red eléctrica pública. Cada subestación incorpora un transformador encapsulado herméticamente, un equipo de media tensión aislado del tipo 8DJH y una centralita de baja tensión Sivacon S8. Todas ellas están dotadas igualmente de hardware de comunicación en el que se han volcado tecnologías IoT (Internet of the things – Internet de las cosas), gracias al cual se puede obtener de ellas información sobre el estado de las distintas subestaciones en cualquier momento.
Aral puede conectar bien con una estación determinada, bien con todas ellas de manera conjunta para conocer su estado, sus condiciones de funcionamiento, la actividad realizada etc, lo que le permitirá garantizar a los clientes de sus estaciones de servicio la completa funcionalidad de sus estaciones de carga ultrarrápida. Mediante unos sensores en todas ellas se pueden generar unos datos que garantizan la monitorización contínua del «estado de salud» ?por así decirlo? de la instalación y un funcionamiento seguro del equipo. Los valores recogidos de todas las subestaciones se transmiten mediante interfaces de comunicación a un sistema de IoT de nivel superior basado en la nube.Datos que se evalúan y visualizan a través de una aplicación web para ir mejorando el funcionamiento y sus prestaciones a los clientes.
«Esta subestación inteligente no sólo permite a Aral introducir tecnología de carga ultrarrápida, sino que también asegura mayor fiabilidad y una mejor utilización de la red dentro de la infraestructura existente», dijo Stephan May, CEO de Sistemas de Distribución en Siemens Smart Infrastructure. «La monitorización de datos en tiempo real permite un uso óptimo de los activos. Por esta razón, la digitalización es un requisito previo importante para una gestión eficiente de la carga y para optimizar el uso de los recursos energéticos«.
70.000 puntos de carga en 2030.
El despliegue de cargadores de alta potencia en la red de estaciones de servicio de Aral en Alemania forma parte de la estrategia de BP para incrementar su número de puntos de recarga habiltiados en Europa. Su estrategia le permitirá incrementar desde los 7.000 puntos hábiles de que dispone en 2020 a los 70.000 con los que espera contar en 2030. Aral opera todas las estaciones de carga ultrarrápida por su cuenta. Estas suministran energía renovable al 100 por cien y, suponiendo que disponga de la tecnología adecuada en sus baterías, los vehículos eléctricos que usen la instalación pueden recargar por completo la capacidad de las mismas en tan solo 10 minutos, lo que les proporcionará capacidad para recorrer hasta 350 km más en su viaje.
