Los chicos de Volkswagen encargaron a comienzos de los años '50 al fabricante Wilhelm Karmann la construcción de un bello vehículo de precio razonable. Tras años desarrollando este futuro automóvil para la firma alemana, Karmann dio con la clave al combinar la sencilla y fiable plataforma del Volkswagen Escarabajo de la época con una atractiva carrocería que había sido diseñada por la casa italiana Carrozzeria Ghia.
Nacía así el ya legendario Volkswagen Karmann Ghia, que inicialmente debutó en el año 1953 con el nombre de Karmann Concept ante los ojos de Heinrich Nordhoff, gerente de Volkswagen por aquellos entonces, quien finalmente dio luz verde para acabar su desarrollo y comenzar con su producción, que arrancó en el mes de agosto de 1955 en la factoría de Osnabrück.
Tenía apenas 36 CV de potencia
A pesar del deportivo diseño exterior, su mecánica era de lo más sencilla y austera, pues aquel Karmann Ghia se conformaba con un motor heredado del Escarabajo con apenas 36 CV de potencia, el cual además tenía que mover un conjunto que pesaba unos 70 kilos extra. Por lo tanto no era de lo más rápido del mercado, demandando prácticamente 28 segundos para acelerar de 0 a 100 km/h.
A pesar de ese detalle, estos Volkswagen Karmann Ghia, que se fabricaron con carrocería coupé o descapotable, eran realmente divertidos de conducir por su configuración de motor y propulsión traseros.
Se convirtieron en vehículos realmente populares, porque en los 19 años que duró su producción se fabricaron 362.601 con carrocería Coupé y 80.881 con carrocería descapotable. Lo curioso es el furor que levantó en Estados Unidos, donde fueron enviados cerca de 279.000 ejemplares a lo largo de su vida.
En todo ese tiempo y hasta que finalizó su vida comercial en 1974, el Karmann Ghica se actualizó constantemente y al final de sus días incluso ya contaba con una mecánica que proporcionaba 60 CV de potencia.
