El ‘gran hermano’ que todo lo ve en las carreteras no nos deja despistarnos. La Dirección General de Tráfico cuenta con cerca de 900 radares fijos incluyendo los de tramo. Fruto de ellos, el año pasado se interpusieron un total de 2,19 millones de multas. Y buena parte de estas sanciones las aglutinan medio centenar de cinemómetros fijos que, según sus propios datos recién publicados, son los 50 radares que más denunciaron en todo 2021.
Un 45,7% de las sanciones aplicadas por radares fijos fueron relativas a excesos de velocidad. Sumando a este porcentaje las multas aplicadas por los radares móviles (863.776), constituyen más de la mitad de las sanciones que pone la DGT: un 63,7%. Y es que, aunque siempre se persigan nuevos supuestos y se endurezcan otros, la velocidad siempre será el enemigo número uno.
Los radares que más multan: Valencia AP-7 (Km 478)
Con 60.525 multas, el radar dependiente de la DGT que se alza en el podio como el más activo se encuentra ubicado en la provincia de Valencia. Concretamente está en la AP-7, en el kilómetro 478. Sanciona a la friolera de 166 conductores por jornada, lo cual es un ritmo abrumador. De hecho, este radar lleva años apuntando maneras.
Este dispositivo de control de velocidad es, por tradición, de los más activos de España: en 2020 fue segundo con 47.711 denuncias, y eso que hablamos de un año raro, dado que los desplazamientos bajaron notablemente por las restricciones derivadas de la pandemia. Pero si volvemos a un año normal, como 2019, también fue el que más multas puso, aunque es cierto que ese año sus denuncias fueron algo menores a las de 2021: un total de 59.443.
