El Mini Cooper Cabrio 2024 viene a confirmar lo que ya es una realidad: la electrificación avanza de manera imparable y va llegando a todos los rincones del mercado. Hasta hace bien poco, este nicho de mercado estaba formado por las versiones con techo de lona del Smart Fortwo EQ y del Fiat/Abarth 500e.
A ellos se sumó Mini con un Cooper SE de la actual generación, aunque con una tirada limitada (999 unidades, de las que 53 han sido para España) y a un precio desorbitado: 61.000 euros. De hecho, fue presentado en verano de 2022 como modelo conceptual y, en apenas unos meses, se aprobó su producción. Sea como fuere, el Cooper SE Cabrio ya no aparece en el configurador de la marca, por lo que es de suponer que todas las unidades fueron vendidas.
Lo que está claro es que Mini seguirá contando con su carrocería descapotable pese a convertirse en un modelo 100 % eléctrico… ¿o no? En principio, la marca británica había anunciado que el nuevo Mini iba a ser un coche 100 % eléctrico, y así era de suponer en su derivado con techo de lona. Pero estas fotos han revelado un detalle sorprendente: una salida de escape en la parte central del paragolpes trasero.
De hecho, el diseño de las llantas y las pinzas de freno en color rojo concuerdan con las de las imágenes espía que nos facilitaron nuestros colegas de SH Proshots el pasado mes de septiembre, si bien resulta que el paragolpes delantero de este Mini Cooper Cabrio es completamente diferente, prácticamente cerrado.
Sea como fuere, todo indica que el Mini Cooper, al contrario de lo que se esperaba, contará con alguna versión de combustión, muy probablemente para la versión deportiva John Cooper Works. Y de ser así, el bloque de cuatro cilindros y 2.0 litros tiene todas las papeletas para ser el elegido, probablemente con una potencia en torno a los 250 CV.
El Mini Cooper Cabrio 2024 seguirá una línea continuista
Dejando de lado la posible variante de combustión, lo seguro es que mantendrá una de sus señas de identidad, como son las cuatro plazas. Es muy probable que Mini haya trabajado en ganar algo de espacio para las piernas en los asientos traseros, gracias al empleo de una nueva plataforma. De hecho, en una de las imágenes se intuye una persona, aparentemente adulta, acomodada en uno de los asientos de detrás, que en el actual modelo apenas son utilizables por niños.
Otro aspecto está en el maletero, uno de los puntos más críticos de este tipo de modelos. Por un lado, la capota necesita mucho espacio cuando esta plegada, especialmente en la parte superior del espacio de carga. Y por otro lado, la imposibilidad de contar con un portón obliga a usar una pequeña tapa que deja una boca de carga bastante angosta. En cualquier caso, la capacidad del Mini Cooper Cabrio no variará mucho respecto a la del Hatchback.
Respecto a la gama eléctrica no hay muchas dudas. El modelo de acceso será el Cooper E, con 184 CV y una batería de 40,7 kWh que le otorgará una autonomía de unos 300 kilómetros; en el caso del Hatchback, oscila entre 285 y 305 km.
La segunda opción será el Mini Cooper SE Cabrio, con 218 CV y una batería de 54,2 kWh de capacidad, que en el caso del Mini con carrocería cerrada le lleva a un rango de entre 377 y 402 kilómetros; es de suponer que algo menos en el descapotable, ya que su peso será entre 80 y 100 kilogramos mayor, aproximadamente, a igualdad de motorización.
Por último, la capota no cambiará en exceso respecto a la del actual modelo. Como atestiguan las imágenes seguirá siendo de lona y tardará en torno a 18 segundos en completar su movimiento, tanto abrir como cerrar. En el actual modelo, esta operación se puede realizar hasta a 30 km/h.
