El BMW M8 Competition ya es una máquina absolutamente brutal, ya que bajo su largo capó cuenta de serie con un motor V8 twin-turbo de 4,4 litros que es capaz de producir 625 caballos. Dicha potencia es transmitida al asfalto por medio de su tracción total y a través de una caja de cambios automática de ocho relaciones. Con estas cifras es con las que ha empezado Manhart a trabajar y, tras algunos ajustes, nuevo kit de turbo, un intercooler nuevo y algún retoque electrónico, el preparador germano ha podido sacar del motor 823 caballos de potencia y 1.050 Nm de par. De esta forma su MH8 800, que es como se llama esta criatura, es capaz de pasar de 0 a 100 km/h en tan solo 2,6 segundos, lo que es 0,4 segundos menos de lo que anuncia BMW para su M8 Competition oficial; 3,2.
De 100 a 200 km/h en 5,7 segundos
Es por tanto el M8 Competition más rápido que hay en el mundo ya que, además de su recorte en el tiempo de 0 a 100, la velocidad máxima que ha conseguido alcanzar es de 311 km/h por los 305 que anuncia el modelo de serie; y eso si se le equipa el paquete opcional M Driver.
Además de la evidente potencia extra que recibe, el MH8 800 rebaja su altura en 30 mm, cuenta con un lip delantero en fibra de carbono, difusor trasero en carbono también, una raya dorada que recorre el largo del coche en su parte superior, llantas cóncavas de 21 pulgadas en negro y un sistema de escape personalizado Manhart que cuenta con las salidas o bien en carbono o bien cerámicas. Este escape también tiene control de la válvula, para hacer más o menos ruido.
Para terminar, el MH8 800 añade distintos toques en carbono en el interior, levas tras el volante de mayor tamaño y también en este ligero y resistente material y un volante personalizado en el que, como no podía ser de otra manera, prima el uso de fibra de carbono.
