En Gloucestershire, a solo 1 hora y media de Londres y a 30 minutos de Birmingham es donde tiene su cuartel general el preparador británico Lichfield, que es uno de los mejores en «meter mano» a un deportivo de la talla del Nissan GT-R, aunque no es lo único que domina a la perfección, pues no le tiene miedo a Ferrari, Porsche, Audi, Mercedes-AMG…
Todo lo que quieras para tu GT-R
Para este deportivo nipón, Lichfield ofrece todo tipo de nuevos componentes aerodinámicos, mejoras para sus suspensiones, frenos más potentes, diferenciales… Y cómo no, mejoras para su motor 3.8 V6 Biturbo que comienzan en las 1.133 libras (unos 1.270 euros) y que elevan su potencia original en unos 70 CV. Aunque en el otro extremo también nos encontramos con su Stage 5.5, que cuesta 16.565 libras (unos 18.550 euros), pero que ya alcanza los 775 CV de potencia.
Semejantes datos se reducen a escombro cuando hablamos de su última criatura, que además ha sido bautizada con el nombre de Litchfield LM1 RS GT-R. Hablamos de uno de los Nissan GT-R más salvajes, porque su propulsor estrena dos turbocompresores BorgWarner de competición, nuevos pistones, bielas, válvulas, sistema de inyección, sistema de admisión… Vamos que todo es prácticamente nuevo y creado para semejante bólido, que incluso estrena un completo escape fabricado en Inconel. Gracias a todo ello se habla de unos 1.100 CV de potencia.
Preparado para Nürburgring
Lichfield le ha dotado de una nueva carrocería, pues esta se ha fabricado en carbono, nuevos componentes aerodinámicos inspirados en los que usan estos Nissan GT-R Nismo GT500, un completo fondo plano, suspensiones Öhlins…
Y con semejante Litchfield LM1 RS GT-R se van a plantar en el «Infierno Verde» de Nürburgring para ver de lo que es capaz. Hablan de que será más rápido que el Nissan GT-R Nismo, que marcó un tiempo de 7 minutos y 8 segundos, pero también más veloz que el Porsche 911 GT2 RS, que necesita 6:47,3 minutos y que a día de hoy es el coche de producción más rápido.