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Ford Mustang Mach-E. Adaptado a los gustos de los europeos

Los planes de la firma del óvalo azul con respecto a la electrificación en el Viejo Continente son claros y en su hoja de ruta está traer no menos de 18 vehículos antes de que termine el próximo año. Como buque insignia está el Mach-E, un modelo construido especialmente para las carreteras y estilos de conducción europeos.

En pruebas en lagos congelados, en desiertos abrasados o haciendo uso de simuladores de conducción de última generación, los equipos de ingeniería de Ford han trabajado por todo el mundo para desarrollar este Mustang Mach-E, que ofrece una increíble experiencia de conducción.

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Instalaciones en Lommel, Bélgica

Para adaptarlo a los estilos de conducción de los europeos, el equipo de las instalaciones de las instalaciones de pruebas de Ford en Lommel (Bélgica), trabajaron en las características de la suspensión, la dirección, el motor e incluso la tecnología de asistencia al conductor.

Haciendo uso de los 100 kilómetros de pistas de pruebas de las instalaciones de Lommel, que recrean superficies de carreteras desde el pavimento belga hasta los adoquines franceses, y réplicas de superficies de carreteras como del Reino Unido, Alemania o España, los ingenieros incorporaron un toque europeo. Estas carreteras más estrechas, con límites de velocidad más altos, requieren respuestas únicas de la dirección conectada y segura, apoyada por ajustes seleccionados para los amortiguadores y barras antivuelco del sistema de suspensión. Además, los neumáticos también se han seleccionado especialmente para ofrecer equilibrio perfecto entre agarre y confort.

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Los sistemas de asistencia al conductor, como el Control de Crucero Adaptativo con Stop & Go, el Reconocimiento de Señales de Velocidad y el Centrado de Carril, son capaces de interpretar las señales de tráfico y de las marcas de los carriles en todo el continente. Además, la entrega inmediata de energía eléctrica se beneficia de las respuestas favoritas de los conductores europeos.

El Mustang Mach-E se ha marcado el objetivo de ofrecer una autonomía de conducción WLTP puramente eléctrica de hasta 610 kilómetros en configuración de batería extendida y tracción trasera.