El i30 de la tercera generación es más largo, más ancho y más bajo, y a pesar de todo ha adelgazado 28 kilogramos gracias a que en su carrocería se ha utilizado dos veces más cantidad de acero de alta resistencia que en el modelo anterior, aumentando a su vez la rigidez un 22 por ciento. Su diseño es cien por cien nuevo, y carrocería y mecánica se asientan sobre una evolución de la plataforma actual. Las mejoras afectan a la suspensión trasera y a la dirección. Y es que el multibrazo trasero se ha optimizado notablemente con un eje superior, dos inferiores -sólo uno hasta ahora- y el brazo longitudinal. Con ello se ha conseguido un mejor guiado y control de la rueda. La dirección, por su parte, es más directa, con pocas fricciones internas y un software que evita ese vacío habitual al circular en línea recta. Esta dirección, que sigue teniendo asistencia eléctrica, transmite mucho más al conductor y recupera el mejor tacto de las antiguas asistencias mecánicas. Según los ingenieros de la marca, en comparación con su predecesor es un 10 por ciento más directa y la respuesta del vehículo es 15 milisegundos más rápida. Con todo, el resultado global es fantástico y el coche muestra un tacto premium combinado con un aplomo y una eficacia sorprendentes, incluso aumentando el ritmo.
Sistema integrado Stop and Go
El nuevo i30 hereda algunas motorizaciones de la anterior generación, pero también estrena otras muy interesantes. Todos los motores vienen de serie con el sistema integrado de Stop and Go (ISG); y se puede elegir entre el nuevo T-GDI 1.4 -turboalimentado de cuatro cilindros y 140 caballos que estrena el i30 para la marca-, el T-GDI 1.0 -turboalimentado de tres cilindros y 120 CV- y, como único motor diésel, un 1.6 turboalimentado de cuatro cilindros con tres niveles de potencia: 95, 110 y 136 CV. Los consumos medios y emisiones de CO2 empiezan, por abajo, en 3,4 l/100km y 89 g/km. A estas mecánicas se puede acoplar el cambio manual de seis velocidades o el automático de doble embrague con siete velocidades, cuya respuesta es directa y eficaz.
El motor tricilíndrico de gasolina de 120 caballos hay que llevarlo alto de vueltas para que muestre una respuesta propia de esa potencia, un empuje solvente que sorprende si tenemos en cuenta su baja cilindrada; aunque, a decir verdad, el consumo se muestra muy sensible al tipo de utilización y puede pasar de los 4,5 l/100 km homologados hasta casi 7 litros de media si se conduce sin miramientos.
Pero la verdadera sorpresa nos la hemos llevado con el nuevo 1.4 T-GDI de 140 caballos. Se trata del bloque Kappa que en el anterior i30, sin turbo y con inyección indirecta, rendía 100 caballos. Ahora, con turbo e inyección directa, distribución y admisión variable y 14 kilogramos menos de peso, se convierte en un bloque compacto y ligero en el que, además, se ha reducido ligeramente la cilindrada para mejorar la fiabilidad. El funcionamiento del i30 con este propulsor es suave, silencioso y eficaz, unas sensaciones que se multiplican si se combina con el cambio automático de doble embrague. Y esta vez los consumos sí se mantienen en cifras comedidas, salvo que se realice una conducción a ritmo desmedido. Con estos atributos, el 1.4 T-GDI se convierte, sin duda, en el motor de gasolina más equilibrado y recomendable de la gama, y casi del segmento. Aunque para los clientes que prefieren el diésel, la versión de 110 caballos parece la más equilibrada, con un consumo medio de 3,4 l/100 km y unas prestaciones interesantes.
Gran equipamiento con un interior de calidad
El interior del nuevo i30 destaca por su calidad. Salpicadero y laterales en acabados blandos al tacto, gran insonorización del habitáculo, mandos con un manejo suave y agradable, ajustes rigurosos y gran calidad percibida se combinan para poner el listón muy alto, como mínimo a todos los rivales de marcas generalistas; situándose al nivel de modelos de referencia como el Golf. No ha ganado mucho en espacio interior, pero sí en capacidad de maletero, que pasa de 378 a 395 litros. E incluye una rueda de repuesto de emergencia. Eso sí, el depósito de combustible ha reducido su capacidad tres litros, y pasa de 53 a 50.
El nuevo i30 cuenta con la última tecnología en seguridad activa para cumplir con las normas europeas de protección más exigentes: airbag de rodilla, sistema autónomo de frenado de emergencia con aviso de colisión frontal, control de crucero inteligente, detección de ángulo muerto, alerta de tráfico trasero, sistema de alerta por cambio involuntario de carril, función de información del límite de velocidad y asistencia para luz de carretera, detección de fatiga de conductor… Todo ello convierte al i30 en uno de los vehículos con la dotación de seguridad más avanzada. Desde la versión básica el i30 incorpora en su equipamiento de serie 8 airbag, control de presión de los neumáticos, sistema de frenada autónoma de emergencia, sistema de aviso de colisión frontal, sistema de detección de fatiga del conductor y sistema activo de cambio involuntario de carril.
Hay un Hyundai i30 por 14.900 euros. Es la versión 1.0 T-GDI de gasolina y 120 CV con acabado Klass -disponible en el segundo trimestre-, y además del descuento promocional básico de 3.400 euros lleva rebajados otros 1.500 por financiar con la marca y 700 de fidelización. En el caso de los diésel, el descuento para el i30 CRDI de 95 CV -llega en abril- será el mismo, hasta lograr un precio final de 15.950 euros. El resto de los diésel disfrutará de un descuento básico de 4.000 euros.
Más i30, entre otras novedades. La gama crecerá más que nunca
La tercera generación del i30 va a crecer en versiones, y aunque de momento solo se va a vender la carrocería de cinco puertas, la casa coreana presentará en el Salón de Ginebra, en el mes de marzo, la versión Wagon. Durante la segunda mitad del año llegará un i30 N con una potencia de 270 caballos, y ya en 2018 aparecerá un i30 Fastback con carrocería mitad familiar mitad coupe. Pero, además, este año la marca presentará un SUV del segmento B. Y para 2020 Hyundai prevé tener cinco híbridos, cuatro híbridos enchufables, cuatro eléctricos y un modelo de pila de combustible.