Se llama Alfa Romeo Z33, es un diseño de Zagato y pudo haber cambiado la historia de Alfa Romeo. En 1984, este monovolumen de tres puertas fue una de las novedades más destacadas del Salón de Ginebra; “destacada”, que no necesariamente “popular”. Por aquel entonces, la feria suiza era una de las citas más importantes del año. Aún faltaban entre 15 y 20 años para que Internet comenzase a llegar a nuestros hogares, así que si querías saber las novedades del mundo del motor corrías al quiosco para hacerte con las revistas de esa semana y descubrir lo que se había exhibido en la hoy moribunda feria suiza.
En aquel 1984, Zagato presentó em Ginebra un monovolumen compacto de cuatro metros de longitud, 1,72 de anchura y 1,60 de altura basado en la plataforma del Alfa Romeo 33, que fue un verdadero superventas, aunque hoy apenas queden unidades en funcionamiento.
Lo curioso es que, con aquel Alfa Romeo Z33, la firma italiana se anticipó a la moda de los monovolúmenes, a la que aún le faltaba un tiempo para llegar. El Renault Espace se lanzaría en julio de 1984, tres meses después de haberse presentado este Alfa, y hay que recordar que la demanda inicial del francés fue muy discreta.
El Alfa Romeo Z33 fue un vehículo adelantado a su tiempo
Alfa Romeo se había adelantado al menos un par de años a su época con una propuesta difícil de asimilar por un mercado que iba en otra dirección. En 1984 conocimos el Ferrari 288 GTO, el Peugeot 205 Turbo 16, el Renault 11 Turbo, el Audi Sport Quattro… La crisis del petróleo parecía haber quedado atrás y los tiros iban por otro lado.
Además, no podemos negar que la propuesta de Zagato es una de las menos afortunadas del carrocero italiano. Sus minúsculas ruedas en comparación con la voluminosa carrocería o el hecho de transformar una berlina compacta de cuatro puertas en un monovolumen con sólo dos puertas laterales no parecía tener mucho sentido.
Hay que aclarar que no estamos hablando de un ejercicio de diseño pensado para llamar la atención. La fábrica de Zagato en Terrazzano di Rho, al noroeste de Milán, estaba preparada para comenzar la producción.
Algunas fuentes hablan de la crisis económica y los problemas financieros por los que atravesaba la compañía italiana en aquella época, pero lo cierto es que el concepto no fue en absoluto popular, hasta tal punto que cuesta encontrar referencias sobre este Alfa Romeo Z33 en la hemeroteca cuando consultamos las publicaciones europeas de la época, algo en lo que los ya mencionados “compañeros de salón” del monovolumen italiano tienen también mucho que ver.
Un interior revolucionario para el Alfa Romeo Z33
Pero si las formas de la carrocería eran, cuanto menos, cuestionables, lo cierto es que el interior mostraba soluciones muy interesantes, redefiniendo por completo el concepto de espacio interior del automóvil. Por aquel entonces, la marca Alfa Romeo se asociaba con conceptos como “deportividad”, dejando otros aspectos como la “versatilidad” en un segundo plano.
En el habitáculo del Alfa Romeo Z33 había espacio para seis ocupantes en tres filas de asientos, con una eventual séptima plaza en la segunda fila, entre los asientos principales, todo un milagro en una carrocería de cuatro metros con un habitáculo planteado como si se tratara de una sala de estar, en la que incluso las puertas delanteras (y únicas) contaban con un bolsillo de tela que parecía un revistero.
Por otro lado, la base mecánica del Alfa Romeo 33 era realmente interesante, ya que disponía incluso de una versión con tracción total, lanzada tan sólo unos meses atrás en el Salón de Fráncfort (Alemania), que era la base perfecta para crear una especie de SUV en una época en la que este segmento del mercado tampoco existía.
De hecho, el nombre completo del vehículo no dejaba lugar a la duda, ya que el prototipo se presentó en realidad como Alfa Romeo Z33 Tempo Libero (Tiempo Libre), y su público potencial es ése al que parece que van hoy dirigidos prácticamente todos los nuevos lanzamientos: “familias jóvenes con buen nivel adquisitivo aficionadas al ocio activo”, una frase que ha llenado páginas y páginas de dosieres de prensa y diapositivas de “powerpoints” en las presentaciones de vehículos a los medios.
En cualquier caso, el diseño de Zagato no fue entendido y no ha envejecido bien, a diferencia de la mayoría de las propuestas del carrocero milanés. Aunque todo es subjetivo en materia de diseño, quizá su mayor acierto era un frontal claramente inspirado en el Alfa Giulietta de 1977, mientras que la original sección elevada en la parte trasera que pretendía evitar el “efecto furgoneta” no estaba nada bien resuelta.
Dos años más tarde, Alfa Romeo sería adquirida por Fiat para evitar su desaparición y, con ella, miles de puestos de trabajo. Es poco probable que la entrada en producción del Alfa Romeo Z33 hubiera cambiado nada al respecto, pero, de haberse fabricado, quizá hoy la gama del fabricante italiano sería completamente diferente.
Galería de fotos del Alfa Romeo Z33 Tempo Libero
