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Audi A5 Coupé. Más seductor

Hace un par de semanas viajamos hasta la localidad alemana de Ingolstadt para acudir a la presentación mundial del nuevo Audi A5 Coupé. Fue un acto extraordinario en el que pudimos ver por primera vez la segunda generación de un modelo que en apenas nueve años se ha convertido en un icono del diseño. En su lugar de nacimiento (allí se fabrica) conocimos sus secretos; ahora hemos tenido ocasión de ponernos al volante de su amplia gama por carreteras portuguesas.

Mientras acudíamos al evento recordábamos datos y cifras del nuevo protagonista. Comparte la plataforma MLB con su hermano 'convencional', el A4, y con respecto al modelo al que sustituye se quita grasa y mete músculo: frontal y zaga más aparentes, línea de cintura retocada… además de crecer 48 milímetros en longitud y dejarse por el camino 60 kilos de peso de media. También es ocho milímetros menos ancho que antes y reduce la altura otros dos, aunque, curiosamente, mejora sus cotas de habitabilidad.

A pesar de todo mido 1,70 metros y mi cabeza roza en el techo en las dos plazas traseras. Sí es evidente un mayor espacio para las piernas, una presentación del interior que se rodea de mayor calidad y tecnología y nos 'creemos' que el maletero ofrece 465 litros de capacidad, 10 más que antes. El respaldo trasero, dividido en una proporción 40/20/40, se abate desde tres palancas situadas en el compartimento de carga, acción sencilla y muy práctica.

Pero hemos venido a conducir. Nos dijeron en su día que la gama de motores era un 17 por ciento más potente y un 22 más eficiente de cara al consumo. Los protagonistas son tres variantes diésel, un 2.0 TDI de 190 CV y un 3.0 TDI V6, con 218 y 286 CV, respectivamente, y otros tres bloques de gasolina, un 2.0 TFSI con 190 y 252 caballos, y un nuevo 3.0 V6 TFSI V6 con 354 CV que da vida al S5, el modelo más potente de la gama hasta que aparezca el nuevo RS5.

Iniciamos nuestro recorrido y elegimos la variante 2.0 TDI de 190 caballos con tracción delantera y caja de cambios S tronic de siete velocidades, la combinación que mayores ventas acaparará en el mercado español. Está claro que el diseño es el argumento principal en la compra del A5 Coupé… Este propulsor sorprende por su refinamiento, bajo nivel sonoro y rendimiento. Sube de vueltas por encima de las 4.200 rpm si se le pide y, a la vez, es capaz de empujar con fuerza desde apenas 1.500 vueltas. El cambio S tronic de doble embrague es un gran aliado a la hora de gestionar las marchas por su rapidez.

El Audi Drive Select es ahora equipamiento de serie en toda la gama y ha 'radicalizado' su actuación. Nos explicamos. De los cinco programas que ofrece, el Comfort es ahora más confortable y el Dynamic más deportivo. Podemos llevar un ritmo muy alegre, aunque cuando llegan las curvas nuestra unidad no se muestra tan ágil como el resto de variantes dotadas con tracción quattro. Ojo, que la puede llevar en forma de la nueva quattro ultra, que pasa par al eje trasero sólo cuando es necesario, elemento disponible sólo con los bloques de cuatro cilindros y, de momento, con cambio manual. El resto sigue apostando por la tradicional quattro con diferencial Torsen. Por cierto, el consumo en nuestro recorrido firmó unos atractivos 5,8 litros.

La segunda parte del recorrido la afrontamos con el 2.0 TFSI de 252 CV S tronic (también dispone de una caja manual de seis relaciones, al igual que los 2.0 TFSI y 2.0 TDI). El salto es abismal, tanto en prestaciones, como en tacto general y en dinámica, ya que entra y sale en los giros cerrados con menos esfuezo y más nobleza. En modo Dynamic nos deja acariciar las 6.000 rpm, pero a cambio el consumo se dispara y resulta complicado bajar de los 8,0 litros.

Nuevo S5, mismo nombre, diferente motor

Para el final nos reservamos la guinda. Uno de cada cuatro modelos que se venden del A5 Coupé en el mundo son S5 o RS5. Nos ponemos al volante del primero, que llegará a la vez que el resto de la gama. Con respecto al modelo anterior el propulsor 3.0 V6 TFSI conserva el nombre, el diámetro y la carrera de los cilindros. Nada más. El resto es nuevo, hasta el punto de que incorpora 800 piezas nuevas y un turbo ubicado entre las bancadas de cilindros (antes apostaba por un compresor mecánico). El resultado son 354 caballos de potencia (21 más), 500 Nm de par y 14 kilos menos de peso.

Pero basta de palabras. Al volante iniciamos el recorrido por una zona urbana. Basta con pisar el acelerador y ya 'enseña los dientes' prácticamente desde parado (el par máximo está disponible a 1.370 vueltas). En autopista se convierte en un coupé tan confortable como rápido, pero es cuando llegan las curvas donde se disfruta de verdad. Sube de vueltas hasta las 7.000 rpm en un abrir y cerrar de ojos gracias a la nueva caja Tiptronic con convertidor de par de ocho relaciones. El sonido que mana del motor invita a pisar el acelerador… y a reducir, pues el atractivo efecto punta-tacón (artificial) eleva nuestro ego. Y la puesta a punto específica del conjunto nos permite elevar considerablemente el ritmo cuando aparecen las curvas, una gozada, más aún si llevamos el diferencial deportivo, elemento que se ofrece en opción (también el 3.0 TDI de 286 CV).

El nuevo A5 Coupé iniciará la venta a finales de julio, pero las primeras unidades llegarán en noviembre, dos meses antes que el A5 Sportback, versión que gana por goleada a nivel de ventas. No se han desvelado todavía los precios, pero sí sabemos que el equipamiento de serie se ha enriquecido con elmentos como el mencionado Audi Drive Select, los faros de xenón o los cinturones de seguridad motorizados y con regulación ahora en altura. También contempla un asistente de atascos, otro predictivo de eficiencia que ayuda a reducir el consumo, un nuevo Audi Parking Assist, un sistema anticolisión, un lector de señales de tráfico y una mayor oferta en conectividad, como el Audi connect eSIM, que incorpora la tarjeta en el vehículo y permite disfrutar de roaming por toda Europa, además de servir de punto de conexión wifi.

En definitiva, se mantiene el atractivo de la obra de arte que diseñó en su día Walter de Silva, pero optimizada en aspectos como la habitabilidad, el confort, la dinámica, la eficiencia y la tecnología enfocada hacia el infoentretenimiento y la conectividad. Seguiremos informando…