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DS. Una gama que apuesta por la seguridad

Aunque, el estilo, el diseño, la exclusividad son sin duda los elementos más llamativos cuando vemos un modelo de DS, la apuesta premium de la marca francesa va más allá; a aspectos que no se ven a simple vista, como la seguridad. Por eso, DS incorpora en sus modelos dispositivos y sistemas para mejorar la conducción y por tanto la seguridad, tanto activa como pasiva.

Por ejemplo, con el sistema DS Connect Box, que entra en funcionamiento cuando hemos sufrido un accidente o una avería. Este dispositivo realiza automáticamente llamadas de emergencia y asistencia alertando a los equipos de emergencia de la posición donde se encuentra el coche. Se puede activar manualmente, pulsando el botón SOS en una situación de emergencia o el botón DS, si hay alguna incidencia mecánica. Y se pone en marcha de forma autónoma en caso de que se desplieguen los airbags.

Pero antes de llegar a esto hay muchos otros sistemas que hacen al conductor más fácil y seguras todas las maniobras incluso las menos peligrosas, como la ayuda al estacionamiento delantero y trasero. Y también la cámara de visión trasera, que transmite sus imágenes a la pantalla táctil de 7 pulgadas integrada en el salpicadero.

Sistemas adaptados a cada modelo

En carretera, el sistema de vigilancia del ángulo muerto avisa a través de un testigo luminoso, de la presencia de vehículos en los espacios no visibles con los retrovisores, evitando de este modo accidentes, que también se reducen con la alerta de cambio involuntario de carril, un aviso en caso de atravesar una línea del trazado sin haber activado los intermitentes.

Como dignos herederos, cada uno a su manera, del DS de época, el célebre «Tiburón», el DS 5 y los nuevos DS 4 y DS 4 Crossback incorporan faros giratorios, ya que los proyectores Xenón son autodireccionables. También prestan una gran ayuda a la conducción nocturna los faros antiniebla LED gracias a la función cornering light, que iluminan la parte interior de las curvas, haciendo más seguro el trazado.

Con una vocación, a priori, más urbanita, los DS 3 y DS 3 Cabrio disponen del sistema de frenado urbano automático Active City Brake. Se basa en un sensor láser de corto alcance, situado en la parte superior del parabrisas, que detecta obstáculos, como un coche circulando en el mismo sentido o parado. Hasta los 30 km/h, identifica el riesgo eventual y comunica directamente con el controlador de frenada, sin que el conductor tenga que pisar el pedal del freno. De este modo, se evita la colisión o, al menos, se limitan las consecuencias del posible choque, al reducir la velocidad del impacto. El frenado de emergencia puede llegar a detener totalmente el vehículo si la situación lo hiciera necesario. En este caso, el vehículo queda temporalmente parado (durante aproximadamente 1,5 segundos) para permitir al conductor retomar el control presionando sobre el pedal del freno.

Hay que destacar que, antes de activar el frenado automático, y si el sistema identifica una situación de peligro, precarga el sistema hidráulico del freno y aproxima las pastillas (función PREFILL, una acción transparente para el conductor). Si la situación requiere un frenado automático, el sistema actuará así más rápido (la ganancia es de algunas décimas de segundos).

Dispositivos para circular 'off road'

Dadas sus prestaciones off road, el DS 4 Crossback debe asegurar un óptimo comportamiento en barro y nieve. Lo consigue gracias al trabajo combinado del ASR, el ESP y el CTI (control de tracción inteligente):

El ESP analiza el terreno permanentemente (5/1000 de segundo) y efectúa correcciones, mientras que el ASR envía datos al ESP en tiempo real (20/1000 de segundo), mide la pendiente, estima la adherencia y analiza el comportamiento del conductor. Por su parte, el CTI gestiona las ruedas delanteras de manera independiente y optimiza la adherencia de las ruedas, lo que permite incrementar en más de un 5% la velocidad de paso por curva.

Sobre nieve o barro el ASR corta el motor, subvirando o sobrevirando según sea necesario. El CTI gestiona las aceleraciones y por lo tanto la adherencia de cada rueda, controlando la fase de arranque. Este sistema permite salir del 80% de las situaciones en las que un conductor se quedaría bloqueado. Su funcionamiento es totalmente automático.