El consorcio europeo cierra el año con tres nuevas anotaciones en su lista de vehículos más seguros y también con estas pruebas cierra el protocolo actual para furgonetas y vehículos comerciales. Un segmento que a partir del próximo año tendrá los mismos requisitos de evaluación que los coches de pasajeros, incluido el impacto totalmente frontal, que es la última novedad en los crash test de EuroNCAP.
Con 31,6 puntos, el 87 por ciento del total posible, en la seguridad de ocupantes adultos, 44,6 (91%) en niños, 19,4 (64%) en peatones y 5,5 (78%) en sistemas de seguridad, han saldado el examen los Citroën Spacetourer, Peugeot Traveller y Toyota Proace que, además de características técnicas y motores, comparten medidas de seguridad y equipamiento.
Protección de ocupantes
Un habitáculo estable en el choque frontal, buena protección de rodillas y fémur de conductor y pasajero en esa prueba, junto a una buena protección de todas las áreas del cuerpo en el golpe lateral, que se saldó con el máximo de puntos en juego, compensan la escasa protección del pecho en el impacto contra el poste y la pobre protección de los ocupantes traseros ante un latigazo cervical.
Protección de niños
Los tres modelos ofrecen la máxima protección al niño de año y medio y muy adecuada al de tres, con un sistema de retención que minimiza en ambos casos la posibilidad de contacto de la cabeza con el interior del vehículo en el choque lateral.
Protección de peatones
En el apartado de peatones el parachoques logró el máximo de puntos por la protección de las piernas, aunque los resultados en la cabeza si se produce un atropello resultaron irregulares, quedando sin comprobar la efectividad del borde delantero del capó por no estar incluida esta prueba en los vehículos de esta categoría.
Sistemas de seguridad
Control electrónico de estabilidad de serie, aviso de cinturón en las plazas delanteras y un imitador de velocidad también estándar, proporcionaban una buena nota en sistemas de seguridad.
