Concretamente, hay personas que jamás se plantean ajustar el volante del coche. Sin embargo, es un elemento que tiene esa capacidad, ya que es importante adaptar la ergonomía del habitáculo a nuestra conducción. Las regulaciones de la altura y de la profundidad permiten encajar la distancia exacta para que el conductor pueda mover los brazos y maniobrar con comodidad.
A continuación, en el artículo te daremos algunos consejos útiles para hacerlo correctamente.
El hábito del taxista
En conclusión, aquí se trata de circular con una mano fuera de la ventanilla y la otra al volante. No obstante, no es que lo hagan todos los profesionales del taxi por sistema, sino que es una postura que se les atribuye de épocas pasadas en las que no se ponían multas por no tener ambas manos en el sitio oportuno. Evidentemente, esta colocación es arriesgado y resta maniobrabilidad. De modo que, conducir así equivale casi a recorrer con un ojo completamente vendado.
