La ofensiva de Opel en el Salón de Fráncfort ha tenido muchos frentes. Por un lado, la presentación del nuevo Grandland X, el modelo con el que va a competir en el segmento de los SUV compactos. Por otro, las variantes GSI, de corte más deportivo, del nuevo Insignia. Eso, unido a los últimos lanzamientos de la marca alemana, como el Crossland X, el Vivaro Life o el Ampera-E, hacen que la marca alemana esté en plena efervescencia.
Con lo que no se contaba es con que en Fráncfort se anunciará que Opel, aprovechando las sinergias y su llegada al Grupo PSA, vaya a lanzar al mercado su primer modelo híbrido enchufable. Y eso es lo que ha anunciado el presidente y consejero delegado de Opel, Michael Lohscheller en el stand de la marca en Fráncfort.
Y un nuevo motor diésel
Ante la mirada atenta de Carlos Tavares, máximo responsable del Grupo PSA, Lohscheller ha anunciado que el Grandland X, el modelo realizado sobre la base del Peugeot 3008 será el primer modelo de Opel que se ofrecerá como híbrido enchufable. Lohscheller lo resume: «Nuestro nuevo Grandland X con tecnología híbrida enchufable es uno de los mejores ejemplos de las oportunidades que se nos abren como parte del Grupo PSA», ha dicho durante la conferencia de prensa. «Seguiremos muy de cerca esta nueva vía».
Antes de que llegue esta versión, a la gama Grandland X se sumará una versión diésel tope de gama que contará con un nuevo cambio automático de 8 velocidades y cuya potencia no ha sido desvelada. Un motor que se sumará a las dos variantes disponibles, el 1.2 de gasolina con 130 caballos o el diésel 1.6 de 120.