Pocos conductores se libran de recibir alguna multa de velocidad a lo largo de su vida. Sobrepasar el límite de la vía es una de las sanciones más numerosas que pone la DGT, seguida de conducir bajo los efectos del alcohol, no llevar puesto el cinturón o utilizar el teléfono móvil al volante.
La mayoría de conductores pagan la multa lo antes posible para poder acogerse a la rebaja del 50% por pronto pago, pero si no estás de acuerdo con la sanción, o ves algún fallo en la denuncia, no tengas tanta prisa por pagar y piensa si deberías recurrirla. Aunque la mayoría de conductores no lo hace, las multas se pueden recurrir y más de una vez, la DGT se ha visto obligada a rectificar.
El conductor acertó al recurrir la multa y ha sentado jurisprudencia
Este conductor tomó la acertada decisión de recurrir la multa, y además ha provocado una resolución que dictará jurisprudencia para que más personas puedan recurrir sus sanciones por este motivo. Para que la administración pueda sancionar a una persona no debe existir un atisbo de duda sobre la identidad del infractor.
La presencia de varios vehículos cercanos que impida asegurar con certeza quién es el infractor puede ser un motivo para recurrir, pero también hay otros motivos relacionados con las fotografías, que pueden tumbar una denuncia. Por eso debes tener en cuenta que para que una multa de velocidad sea completamente legal debe presentar una imagen nítida donde se puede identificar de manera clara el vehículo y además debe haberse captado con precisión la velocidad a la que circulaba.
