¿Tienes amigos absolutamente frikis de la bicicleta? Entonces te habrán contado que un portabicis es un extra imprescindible no solo para profesionales, sino también para aficionados. Una excursión, unas vacaciones… para la ocasión que sea siempre viene bien. Y ya sabes que, como las bicis ocupan mucho espacio en el coche, su ubicación es fuera del vehículo.
La industria ha desarrollado una serie de soluciones de lo más ingeniosas. Se han establecido tres variantes distintas: la baca para bicis, el portabicicletas para el maletero y el portabicicletas para el enganche de remolque. Con un aparato de marca y el montaje correcto, transportar la bici de forma segura y sin incidencias será pan comido. A continuación repasamos cada opción.
La baca para la bicicleta: ideal para economizar espacio
Las bacas para bicis se ofrecen normalmente al usuario con un objetivo fundamental: que el portabicicletas esté bien sujeto en el techo del vehículo. A partir de un punto de anclaje, se coloca en el techo un riel en el que se puede fijar la baca portabicis muy fácilmente.
Otra posibilidad a valorar son puntos de anclaje abatibles, con los que se pueden fijar las bacas fabricadas específicamente para el tipo de automóvil en cuestión. Estos puntos de anclaje constituyen la estructura básica para la baca. No obstante, si no tienes una fijación en el techo de tu vehículo, no pasa nada. Y es que también hay modelos que se pueden instalar sin riel o punto de anclaje. Es el caso de las bacas portabicicletas, que se fijan con cierres o tornillos de ajuste.
