El año 2023 era el punto de partida fijado por la Ley de Cambio Climático, que obliga a los municipios de más de 50.000 habitantes a crear zonas de circulación restringida en sus ciudades. Si se cumpliera la norma, tal y como estaba aprobada, en el nuevo año se deberían crear Zonas de Bajas Emisiones hasta en 150 ciudades españolas.
Estas áreas restringirán el paso a los vehículos más contaminantes. Cada ayuntamiento podrá diseñar su propia ZBE en la que solo podrán entrar los vehículos con un etiquetado medioambiental apropiado, bajo pena de multa. El objetivo teórico de esta medida es mejorar la calidad del aire en estos municipios y reducir los niveles de contaminación de los grandes núcleos urbanos. Si conduces un coche antiguo y no quieres que te multen cada dos por tres, por entrar en estas ZBE, tendrás que planificar bien tus viajes.
El 75% de los vehículos se vería afectado por las ZBE
Según los datos recogidos por la FEMP (Federación Española de Municipios y Provincias), en nuestro país hay 149 municipios y ciudades registran esa cifra mínima de más de 50.000 habitantes. Sin un criterio unificado de actuación, que no se descarta pueda crearse en un futuro, la creación y desarrollo de las ZBE dependerá únicamente de los consistorios y de sus ordenanzas municipales.
La lista de ciudades en la que tarde o temprano deberían proliferar estas ZBE es muy larga. Si tu ciudad tiene más de 50.000 habitantes o te mueves por lugares así, tendrás que lidiar muy a menudo con estas restricciones. Considera que la problemática creada por estas zonas no afectará solo a los vehículos más antiguos. Según la Asociación de Vehículos Afectados por Restricciones Medioambientales (Avarm) alrededor del 75% de los vehículos del parque automovilístico actual (coches sin pegatina y con pegatinas B y C) se verán afectados tarde o temprano por estas áreas. Lo que puede derivar en un caos circulatorio en los barrios exteriores a las ZBE.
